Coralys ya sabe que mató a sus dos hijos
Un grupo de expertos le informó la noticia.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
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Coralys Campos Rodríguez, de 21 años, supo ayer que las puñaladas que les hizo a su hijo Yeriel Rodríguez Campos, de un año, y a su nena Ilán Coral Monge Campos, de tres, les causaron la muerte.
La mujer, que sigue recluida, mantuvo silencio cuando las autoridades le hicieron preguntas sobre el crimen.
Desde que llegó al Centro Médico en la madrugada del miércoles, tras acuchillar a sus hijos en la noche del martes, la mujer se había mantenido sedada. A ésta se le practicó una cirugía abdominal exploratoria que evidenció que la puñalada que ella misma se hizo no le afectó ningún órgano vital.
Pero ayer, antes del mediodía, un grupo de expertos le informó la noticia de que tras su ataque sus hijos murieron.
“Había tristeza y dolor. Estaba afectada, aunque también tiene mucho dolor físico”, dijo el agente Luis Sánchez, quien estuvo presente al igual que la fiscal del caso Laura Hernández.
Cuando las autoridades interrogaron a la mujer sobre el horrible crimen que cometió contra sus propios hijos, ella solicitó la presencia de su abogado Rafael Porrat.
Sin embargo, el día de los hechos Coralys le confesó a su propia familia que sí, que ella había acuchillado a sus pequeños.
La directora de Investigaciones Criminales de la Policía en Carolina, la inspectora Nívea Collazo, dijo a este diario que ayer mismo se enteró que Coralys desconocía que sus hijos habían muerto.
Collazo subrayó que “la señora tiene que estar libre de medicación para que las autoridades puedan tomarle una declaración jurada y que ella pueda admitir o confesar su horrible crimen”.
Ayer, Coralys comenzaría una dieta regular.
El director del Centro Médico, Ernesto Torres, informó que con toda posibilidad Coralys será dada de alta el fin de semana. La radicación de cargos criminales por dos cargos de asesinato en primer grado, Ley de Armas y, probablemente, incendio agravado, ocurrirá entre lunes y martes, agregó Collazo. Hasta el día de ayer a la joven se le había prohibido terminantemente la visita de parte de familiares y permanecía bajo estricta custodia policiaca.
A las 9:50 de la noche del martes, después de discutir con el padre de su bebé de un año, Coralys sacó la gasolina de un trimmer de cortar grama e incendió el cuarto de los menores en su residencia de madera. Los había herido mortalmente con un cuchillo de cocina. Salió de la casa y se los entregó heridos a los bomberos.