No culpable por asesinato, pero sí por conspiración y Ley de Armas.

Un jurado compuesto por siete mujeres y cuatro hombres encontró culpable a Sammy Báez Figueroa por cinco de los 35 cargos que pesaban en su contra por Ley de Armas y por conspiración, pero no por los tres cargos de asesinato en primer grado ni por las dos tentativas de asesinato relacionados con los hechos de la llamada Masacre de Pájaros.

El convicto ni se inmutó cuando la secretaria de la sala del juez José Ramírez Lluch, del Tribunal de Bayamón, leyó el veredicto del jurado pasadas las 9:00 de la noche, pero al final se volteó y saludó  sus familiares, sonriendo.

“La verdad que no te puedo hablar...”, fue lo único que pudo decir el padre de Báez Figueroa, antes de que fuera halado bruscamente por una de sus hijas, sin decir su nombre.

La reacción de las partes fue  agridulce.

El abogado Julio Gil de Lamadrid recalcó que resultó absuelto por los delitos violentos relacionados con las muertes de Alexis “el Pillo” Olivo Marrero, su hija Arielyz, de dos años, y Ángel Iván Vargas, de 16 años, y de las tentativas de asesinato por las heridas que recibieron la pareja de Olivo Marrero, Claribel Ortiz, y su hijo de tres años por los hechos del 5 de mayo de 2009 en el barrio Pájaros, en Toa Baja.

“De 41 cargos, salió absuelto de 35... (Su cliente) está tranquilo, tomando en consideración todo lo que ha pasado”, manifestó el abogado, quien recordó que está sumariado en la Cárcel Federal esperando por el caso en su contra por violación a la Ley de Armas.

Opinó que esta decisión prueba que el jurado “no le creyó al testigo estrella (Billy Alexis Vargas)”.

Por el contrario, los fiscales Alberto Varcárcel y Enrique Rivera Mendoza indicaron que el jurado sí le creyó o no lo hubiese encontrado culpable por Ley de Armas y conspiración.

Báez Figueroa  enfrenta entre 63 y 202 años, dependiendo de los agravantes y atenuantes que se presentarán al jurado el martes. La sentencia será el 16 de marzo.