Una menor de edad que se alega fue sometida un patrón de abuso sexual en el que participaron al menos 11 personas, entre ellos su madre y dos adolescentes, testificó hoy, miércoles, por medio de circuito cerrado durante la vista preliminar que se sigue contra el grupo de imputados.

En la audiencia, la menor reveló detalles de las primeras dos ocasiones en que cayó víctima de agresiones sexuales por parte de su padrastro.

La adolescente de 13 años de edad fue la primera testigo durante la vista preliminar contra su madre, Yomaris Ruiz Díaz; su padrastro, César Correa Suárez; su tío político, Ramón Correa Suárez; y otros seis adultos que fueron acusados por cargos de agresión sexual y maltrato de menores.

El proceso judicial contra los dos adolescentes detenidos por hechos relacionados con las agresiones se está viendo por separado en el Tribunal de Menores. 

La víctima, quien tiene un bebé de un año de edad producto de los abusos sexuales, inició su testimonio respondiendo preguntas de la fiscal Maritza Valero Ramírez, luego que la jueza Yazdel Ramos Colón emitiera una orden de mordaza y denegara una moción de un abogado de defensa que intentó en vano el acceso de los medios de comunicación a la audiencia. Los acusados miraron a través de un monitor a la menor, que contestaba las preguntas con firmeza y sin dilación.

“Muchos hombres me hicieron daño. Tuvieron relaciones sexuales conmigo”, indicó la adolescente al ser preguntada por la fiscal sobre la razón por la cual se encontraba testificando en la vista preliminar.

Luego de ofrecer algunos detalles sobre la composición de su familia y su vida en una comunidad de Gurabo, relató cómo sufrió una primera agresión sexual cuando tenía apenas nueve años de edad. 

Narró que su padrastro la violó en un monte ubicado detrás de su casa e indicó que no mencionó nada a su madre, ni a ninguna otra persona ante amenazas de muerte vertidas por el presunto victimario. 

“Me fui llorando y antes de llegar a mi casa me saqué las lágrimas para que mi mamá no me viera. Él me dijo que me iba a matar si decía algo. Me lo dijo antes de que todo comenzara”, indicó la adolescente. 

La testigo sostuvo que sentía un profundo rencor contra su padrastro luego de que se registrara la primera violación ante otras preguntas de la fiscal que intentaban indagar sobre su estado mental. 

 “Me encerré en el cuarto y empecé a tirar las cosas…Tenía coraje porque me había hecho eso”, indicó.

Algunos de los abogados de defensa objetaron si la fiscal repetía declaraciones de la adolescente o volvía hacer una pregunta que podía resultar en una contestación similar o parecida, mientras el proceso se llevaba a cabo en dos salas del Tribunal de Carolina para proteger el testimonio de la testigo. 

Antes de que el interrogatorio de la fiscal se suspendiera al acercarse la hora de cierre del tribunal y se repautara otra vista preliminar para el próximo 9 de septiembre, la adolescente narró otra violación cometida por su padrastro, de 37 años, en una casa abandonada cerca de su residencia en Gurabo.

 La joven indicó que su padrastro la llevó a la casa abandonada, que tenía un colchón en el piso, para cometer la violación. 

 “Él abusó de mí. Tenía miedo de mi padrastro”, sostuvo durante su testimonio.

Según las autoridades, Correa Suárez y la madre de la menor facilitaron las agresiones sexuales que fueron cometidas por los otros individuos acusados. La pareja y el tío político de la menor, se encuentran ingresados en prisión tras no prestar una fianza global de más de $1 millón mientras que el resto de los acusados se encuentran en la libre comunidad tras prestar fianzas que fluctuaron entre $7,000 y $21,000.

El resto de los acusados en este caso son Janny Raúl Viera, de 28; Erik Joel Rodríguez, de 22; Agner Miguel Ruiz, de 23;  Edwin Miguel Boria Ramos, de 32; Javier Omar Ruiz, de 37; y Noel Rodríguez Correa, de 20. 

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