Agentes adscritos a la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Humacao investigan el hallazgo de cuatro personas muertas en la residencia E-22 en la calle Golondrina de la urbanización Villas de Candelero, en Humacao.

De acuerdo con el reporte policiaco, a eso de las 10:15 de la mañana se recibió una llamada a través del sistema 9-1-1 en el que se advertía de unas personas muertas en el interior de un auto.

Al movilizarse agentes al lugar hallaron el auto Honda Accord vino del 1996 encendido en la marquesina.

En el interior del vehículo se halló el cuerpo semidesnudo de Eliezer Beltrán López, de 30 años, sentado en el asiento del chofer y en el asiento trasero dos niños: Yariel y Yandel Torres Beltrán, de dos y cuatro años, respectivamente.

No presentan signos de violencia visible y aparentemente murieron asfixiados o intoxicados con monóxido de carbono.

En uno de los dormitorios de la residencia fue hallada muerta Griselis Beltrán Rodríguez, de 23 años, la que se encuentra desnuda en la cama.

La casa estaba hermética por lo que el monóxido se extendió por toda la estructura. Griselis y Eliezer son compadres y los menores son hijos de ella. La residencia donde fueron hallados es de la tía de Griselis, Yamira Rodríguez Gerena, quien no estaba en el hogar por haber sido operada recientemente.

Al lugar se movilizó personal del Instituto de Ciencias Forenses, fiscales de Humacao, agentes de la Policía y otras agencias.

El superintendente de la Policía, José Figueroa Sancha, calificó la escena de "complicada". "Calificarlo como una masacre sería una irresponsabilidad. Esa palabra no cae en esta escena", dijo Figueroa Sancha, al explicar que no hay indicios de violencia. Añadió que a los investigadores les corresponde "unir las piezas".

Un sargento que vive en el área cercana a la escena estuvo en el lugar y la calificó como sumamente triste.

"Estaban todos muertos como dormidos, el olor a monóxido era fuerte, fue como si se hubieran ahogado en una cámara de gas. La mujer tenía el abanico prendido en el cuarto y ella inicialmente no presenta signos de violencia. Las autopsias dirán si hubo algo más. Pero, fue impresionante, parecía que todos estuvieran dormidos. Al abrir la cochera, el gas se olía sumamente fuerte. Al parecer los hechos ocurrieron en horas de la noche y se dejó el carro encendido", dijo el sargento que prefirió no identificarse.