María Judith Díaz Castro fue excarcelada ayer, viernes, de la Escuela Industrial para Mujeres en Vega Alta, tras cumplir 12 años de prisión por el mismo crimen por el que fueron acusados sus hermanos.

Los cargos fueron retirados en medio de la celebración de un nuevo juicio contra los tres hermanos convictos. 

Durante una vista celebrada el viernes, el Ministerio Público presentó una moción solicitando el archivo de los cargos que pesaban en su contra tras surgir prueba que demuestra que el trío no cometió el crimen.

La petición del Departamento de Justicia provocó que el juez Juan Manuel Tirado, del Tribunal de Humacao, ordenara la excarcelación. 

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“La evidencia exculpatoria que da lugar a la solicitud de archivo al amparo de la Regla 247-A de las Reglas de Procedimiento Criminal consta de la retractación de la testigo Yahaira Soto en corte abierta el pasado martes 12 de enero”, expuso el Departamento de Justicia en un comunicado de prensa. 

Soto es prima de la principal testigo del caso, Sharon Pláceres, quien inicialmente fue la que señaló a los hermanos por cometer la doble ejecución a pesar de que había prueba que establecía que habían abandonado la gallera antes de que ocurriera el crimen. Supuestamente, Pláceres, quien alegadamente obligó a Soto a corroborar su falso testimonio, no podrá ser acusada por el delito de perjurio porque los términos ya prescribieron.

Los dos hermanos de la mujer permanecen en prisión y no pudieron ser excarcelados este viernes, ya que cumplen sentencias por el asesinato de Martín Pérez, ocurrido el 19 de julio de 1998 en el barrio Patagonia de Humacao. En este caso, la testigo principal también fue Sharon Pláceres.

David Díaz Castro fue encontrado culpable de asesinato en primer grado, conspiración y artículo 8 de la Ley de Armas y fue sentenciado a 114 años de reclusión. Mientras que a Edwin Díaz Castro lo sentenciaron a siete años y medio de cárcel por el caso de conspiración y a 15 años de reclusión por la Ley de Armas.

María Judith fue absuelta de los dos cargos de conspiración y violación a la Ley de Armas. 

El abogado de Edwin Díaz Castro, el licenciado Rubén Guzmán Torres, quien conforma la representación de los hermanos junto con Carmelo Dávila y Manuel Rivera Lugo, declaró que van a comenzar lo más pronto posible a delinear las estrategias para que se celebre un nuevo juicio para invalidar la convicción por el caso de asesinato de 1998. 

“Lo que se planea es lograr un nuevo juicio para invalidar esa convicción para, entonces, después que se logre un nuevo juicio, lograr que sean absueltos en ese mismo caso por la falta de veracidad del testimonio de Sharon Pláceres, que es la misma testigo del caso que acaba de finalizar”, observó Guzmán Torres, quien reveló que la mujer procreó dos hijos con David y su separación no fue en buenos términos.

En el caso de 1998, la testigo no tiene quién corrobore su versión, por lo que los abogados van a continuar trabajando para invalidar la convicción de los dos hermanos que quedan encarcelados.

“El testimonio de esta señora en el caso que queda es más inverosímil que en el caso que acaba de terminar. En ese caso (el de 1999,) lo que pasa es que era corroborado entre comillas por una prima que eventualmente se desmintió ella misma por el mal de conciencia que tenía. En este caso (por el que permanecen encarcelados los hermanos) no hay nada que la corrobore”, sostuvo Guzmán Torres.

También, dijo, cuentan con el compromiso del Departamento de Justicia para que, tan pronto tengan la evidencia requerida, la presenten a su consideración, ya que existe la posibilidad de que se archive el caso automáticamente.

“Tenemos el compromiso del Departamento de Justicia de presentarle la evidencia que tengamos. Es muy probable que, si ellos se convencen, no haya ni que pasar por el procedimiento, sino que ellos automáticamente archivarían el caso. Tenemos ese compromiso del jefe de fiscales”, precisó el abogado.

Guzmán Torres agregó que su cliente le indicó que tras la decisión de ayer, viernes, se encuentra esperanzado de que después de tanto tiempo clamando por justicia su caso haya sido atendido. Sin embargo, cuestionó quién le compensará a María Judith los 12 años perdidos en la cárcel.

“¿Quién le compensa 12 años de haber perdido a su marido, porque se divorció, las pelas que cogió allá adentro (en la cárcel), el no involucrarse en el crecimiento y la educación de sus hijos por 12 años?”, lanzó el abogado.

Por su parte, en declaraciones escritas, el secretario de Justicia, César Miranda, comunicó a través de su portavoz de prensa, Amber Lee Vélez, su compromiso por proteger los derechos de las víctimas y de los imputados. 

“En ese balance, el Estado nunca puede cerrarse a considerar nueva prueba exculpatoria, incluso, a identificar posibles deficiencias en las investigaciones que producen una convicción. Entonces, al advenir en conocimiento de una retractación como la de Soto Soto el pasado martes, y tras evaluar el resto de la prueba y demás elementos del procesamiento, nunca es tarde para desistir sobre unos cargos que ya no cuentan con el ‘quantum’ de prueba requerido en nuestro sistema de justicia”, leen sus declaraciones.