El ex legislador Luis Farinacci Morales reiteró que siempre ha estado optimista ante su caso, aunque reconoció lo difícil que ha sido mientras sigue su juicio en el Centro Judicial de Ponce.

El proceso continuó en la tarde, en la sala 405, con el contrainterrogatorio de Liza Yajaira Rivera Colón, esposa de Farinacci, cuya  credibilidad enfrenta los cuestionamientos del abogado de éste, Pedro Ortiz.

"Ha sido un proceso difícil para ambas familias. Ha sido tedioso, largo y triste", dijo el ex legislador ponceño a la prensa.

El acusado enfrenta cargos de violencia doméstica por dos incidentes en los que su esposa alega que fue agredida físicamente y amenazada de muerte.

Farinacci Morales acudió al tribunal acompañado por sus padres y varios hermanos y se ha  mantenido  con semblante tranquilo junto a una  batería de abogados que lo representa.

Durante el contra interrogatorio, Ortiz confrontó a la testigo con  su declaración jurada del 15 de julio del año pasado a la Fiscalía de Ponce y lo que declaró en la vista preliminar, apuntando  a  hechos que  no había revelado.
"No lo dije porque no me lo preguntaron. Para mí lo importante era hablar sobre los golpes que recibí", comentó Rivera Colón sobre la línea de preguntas de la defensa.

Como parte del contra interrogatorio a la esposa del ex legislador, el abogado de defensa la confrontó con la evidencia de que había solicitado una pensión de alimentos de $4 mil y esta respondió que esas fueron las instrucciones de su abogada.

Otro punto que tocó Ortiz Alvarez fue que la perjudicada sostenía una relación sentimental con otro hombre para la misma fecha en que se dio la presunta amenaza telefónica. "Nunca he tenido una relación con nadie", mencionó la mujer.

Además presentaron copia del informe de la querella de la Policía en el que Rivera Colón contestó que no había sido víctima de violencia doméstica previamente.

El abogado se dispone a preguntar a la testigo sobre fotos en las que aparece con varios amigos.

"Yo sigo casada, no tengo novio", dijo la mujer.