Aguadilla. El juez Hernán Morales Álvarez determinó no causa en la vista preliminar en alzada a la que recurrió la fiscalía en un intento por sostener cargos por homicidio negligente contra la farmacéutica Carmen Nieves Sánchez y el técnico de farmacia Omar Hernández Ramos.

Los casos que no prosperaron están relacionados con el despacho de un medicamento erróneo a Virgen Díaz Sosa, lo que le provocó la muerte.

El pasado viernes, el juez Diómedes González, de la sala de investigaciones del Centro Judicial de Aguadilla, determinó que no había causa probable para el arresto de la pareja de profesionales en farmacia por el referido delito, pero el fiscal Iván Morales acudió en alzada ayer, fecha en la que prescribía la radicación de los cargos.

Los hechos que se le imputaban a la exonerada pareja de profesionales en farmacia ocurrieron el 20 de noviembre de 2009, cuando Díaz Sosa acudió a la oficina de su médico de cabecera y obtuvo la receta de medicamentos que usualmente tomaba. Cuando entregaron la receta en la Farmacia Malezas, de Aguadilla, le despacharon otro medicamento.

La fiscalía trató infructuosamente de establecer que el médico de cabecera de la víctima le había recetado Metalozone 2.5, que es un diurético que se usa para tratar la presión arterial y el exceso de líquido en el cuerpo, pero le despacharon Methotrexate 2.5, que es para tratar distintos tipos de cáncer, psoriasis y casos graves de artritis.

La víctima falleció el 14 de diciembre de 2009 tras tomar 19 dosis de Methotrexate.

Entre los testigos que utilizó el fiscal Morales en la vista preliminar en alzada para arresto de Nieves Sánchez y Hernández Román figuró la patóloga forense, Edda Rodríguez, quien práctico la autopsia y con pruebas concluyó qué le causó la muerte a la mujer.