Como en una película en que el destino se sale con la suya, ayer falleció de manera imprevista el ex juez del Tribunal Supremo Efraín Rivera Pérez, en un accidente de tránsito mientras conducía su motora Harley Davidson. 

Sus familiares pidieron espacio y “privacidad” a su salida del Instituto de Ciencias Forenses (ICF).

Hasta allí llegó  -a eso del mediodía- su hija Mariela Rivera para la dura tarea de identificar el cuerpo,   pero ni ella ni los  familiares que la acompañaban quisieron emitir comentarios.

Mientras, allegados al ex juez aún no salían de su asombro por la noticia.

El doctor Josué Pabón, quien se describió como médico de cabecera de Rivera Pérez, se desbordó en elogios hacia su amigo.

“Además de ser su médico primario, él se convirtió en casi mi hermano. Pude conocer su ámbito espiritual. Más que otra cosa, éramos hermanos espirituales, hermanos en Cristo”, dijo Pabón.

“Orábamos juntos... hace dos semanas estuvimos en un servicio precioso de oración y compartimos. Siempre admiré su integridad... era un hombre determinado. Era un hombre de autoridad, pero recto y luchador”, agregó.

Rivera Pérez, de 62 años y quien renunció a su puesto en el máximo foro judicial en el 2010, falleció a eso de las 6:25 de la mañana  de ayer tras perder el control de su flamante y lustrosa motocicleta e impactar un objeto fijo en la salida de la carretera PR-2, hacia el expreso Martínez Nadal.

Esa vía estuvo cerrada desde entonces hasta cerca de las 10:40 a.m., unos 20 minutos después de que el cuerpo fuera sacado por personal del ICF.

A la escena se personaron el alcalde de Guaynabo, Héctor O'Neill y el juez presidente del Tribunal Supremo, Federico Hernández Denton, así como otros allegados.

“Las autoridades correspondientes están haciendo la investigación. Hay que esperar el resultado de la investigación. Hasta ahora la información es que la motora impactó el muro y él salió expulsado”, dijo Hernández Denton.

“Su partida nos consterna y nos llena de profundo pesar, tanto por lo inesperada como por las trágicas circunstancias en que acontece”, agregó el juez presidente en un comunicado de prensa posterior.

Asimismo, llegó al lugar del accidente la que fuera  su secretaria, María Santos, visiblemente afectada.

“Era excepcional. Muy humilde. Tremendo ser humano”, expresó con voz entrecortada.

Rivera Pérez fue uno de los fundadores de la Asociación de Abogados,  a raíz de la descolegiación compulsoria, y ocupaba el cargo de presidente emérito.

La presidenta del Colegio de Abogados, Ana Irma Rivera Lassén, envió sus condolencias a la familia y allegados, pero no quiso hacer expresiones adicionales.

¿Qué pasó?

Ningún policía estatal quiso hacer declaraciones en la escena, pero este medio supo que dos conductores de vehículos que viajaban cerca al momento del incidente, indicaron que el ex juez manejaba su motora a velocidad moderada cuando, de momento, se aceleró al llegar a la curva en la entrada al expreso Martínez Nadal.

Fue así como Rivera Pérez perdió control de su motora, chocó con una valla a su derecha y su cuerpo salió expulsado, rodando unos 30 pies en el área verde. El motor del vehículo continuó acelerado lo que provocó que continuara  hasta unos 600 pies más adelante.

Personas en la escena comentaron que el ex juez acostumbraba a viajar en motora los domingos, desde temprano, y que sufría de bajones en los niveles de azúcar en el cuerpo. No obstante, aún no se ha confirmado que el accidente se debió a una complicación de salud.

Al cierre de esta edición, se desconocían sobre las exequias fúnebres.