Debido a que llevan desde Acción de Gracias con un fuego de material vegetativo que crea una gran humareda sobre todo Cayey, el alcalde Rolando Ortiz solicitó este sábado a la gobernadora Wanda Vázquez que active a la Guardia Nacional o envíe mayores recursos a una finca del barrio Matón Abajo para lograr resolver la situación. 

La urgencia de su llamado se debe a que han aumentado las visitas de residentes de Cayey a las salas de emergencia, afectados por la humareda que inunda toda la parte llena de su ciudad y alcanza hasta el barrio Sud de Cidra. 

“Esto coge casi todo Cayey”, denunció el alcalde en conversación telefónica con Primera Hora. 

Ortiz dijo que no tiene quejas de todos los esfuerzos que ha realizado el Cuerpo de Bomberos, la Agencia de Protección Ambiental (EPA, en inglés), la Junta de Calidad Ambiental (JCA) y el dueño de la finca incendiada. Sin embargo, indicó que, tras más de una semana, el humo continúa saliendo del material vegetativo que estaba acumulado allí.  

“Esto requiere a la Guardia Nacional y la intervención de recursos de más alto nivel, porque es un problema de mucho riesgo a la salud”, reclamó el cayeyano. 

Sin embargo, el comandante de la zona de Caguas del Cuerpo de Bomberos, Félix Morales López, aclaró que en el área solo necesitan una excavadora adicional a las dos que ya utilizan para remover el material vegetativo. Indicó que esa petición se la hicieron al municipio y no les han ayudado. 

“Al momento, las operaciones que llevamos a cabo no necesitan demasiado personal. Se trabaja con seis bomberos durante el día en dos turnos. El trabajo principal lo hacen las excavadoras, con el que se divide el material no quemado con el quemado”, explicó. 

El funcionario dijo que el problema principal que tienen es que están trabajando en una zona que representa un riesgo de seguridad. 

“Es una pendiente de cuerda y media, es bastante inclinado”, afirmó. 

Añadió que se trata de un “risco” de entre 200 a 250 pies con “mucho material vegetativo”, que representa un peligro de derrumbe. Indicó que, por esta razón, se han demorado poco más de una semana en extinguir el incendio. 

“La topografía es un obstáculo que hemos tenido para extinguir el incendio”, reconoció, al comentar que no pueden utilizar mucha agua, porque se aumenta el riesgo de derrumbes. 

Morales López comentó que ayer la EPA realizó un estudio de calidad de aire y les hizo unas recomendaciones de rociar la zona donde se concentra el fuego. Esto para evitar la humareda y el polvo que afecta a la comunidad. 

“Nosotros garantizamos que no siga corriéndose (el fuego) al material que no se ha quemado y que no corra al área forestal y entendemos que para esta noche los residentes van a tener mejor calidad de aire. Durante el día, tenemos pronosticado grandes avances y vamos a extinguir gran parte de lo que está generando el humo. Esto es un trabajo de día a día”, sentenció el bombero.  

Explicó, de paso, que no pueden trabajar de noche porque “no puedo identificar un peligro de derrumbe. Yo no puedo tener personal trabajando en la pendiente por razones de seguridad”. 

Por otro lado, a los residentes de Cayey se les ha solicitado que mantengan en sus hogares las puertas y ventanas cerradas, principalmente durante el día ya que se ha corroborado que el humo es más fuerte en estas horas que en la noche. 

“Ya se ha registrado que el particulado en el humo es más intenso en el día que en la noche, por lo que continúa el aviso que ya habíamos emitido sobre la protección ante el humo, como mantener cerradas las puertas y ventanas en lo posible y si se usa aire acondicionado, mantener el filtro limpio para evitar que entre el humo”, detalló Natasha Vázquez, directora de Programas Federales del Municipio de Cayey, en declaraciones escritas.