El menor de diez años que se vio involucrado en un accidente de tránsito en el que su madre Iris Joelis Crespo Cabrera y sus dos hermanitos perdieron la vida, sigue cooperando con su tratamiento y bajo evaluación de los especialistas en trauma.

Así lo indicó a Primera Hora el doctor Israel Ayala, director médico de la Administración de Servicios Médicos de Puerto Rico (ASEM), quien dijo que sí están solicitando que voluntarios vayan a donar sangre.

“Sigue bajo tratamiento con nosotros. Sigue siendo evaluado y seguido por los especialistas de trauma”, explicó.

Mencionó que “desde el día de ayer él presentó estabilidad; sin embargo, por la seriedad del accidente se estaba estudiando para (observar) cualquier problema que se presentara posteriormente”.

El galeno se refiere a que hay lesiones que se presentan 24 horas después.

“En eso estamos, evaluándolo bien concienzudamente y observando todos los elementos que nosotros vemos en ese tipo de paciente”, explicó al mencionar que el niño “está alerta y cooperando con el tratamiento”.

Ayala dijo desconocer si ya el menor conoce de la muerte de su madre de 24 años y de sus otros hermanitos: una niña de 6 y un varoncito de 7 años.

Son los médicos de cabecera quienes deciden si le informan o no a un paciente lo sucedido, ya que tienen que evaluar cómo esto afectaría su tratamiento.

El padre del menor, Abraham Arroyo, se ha mantenido en el hospital. 

Mientras, el director médico de ASEM agradeció a todos los que se han allegado a donar sangre.

“Desde ayer se pidió sangre en la eventualidad de que fuera necesario. Mucha gente ha respondido y queremos dar gracias a todas las personas que han respondido a ese llamado”, sostuvo al informar que aún pueden ir al Banco de Sangre de Centro Médico en Río Piedras, sin importar el tipo de sangre.

A preguntas de Primera Hora, Ayala reconoció que en casos como estos la gente quiere mantenerse informada, pero “hay que tener paciencia; los médicos nunca tienen prisa para evaluar a sus pacientes; se hace conforme a los protocolos y a lo que establece la buena norma de la práctica de la medicina”.

Crespo Cabrera transitaba ayer en su Toyota Corolla color vino por la avenida Jesús T. Piñero, en San Juan, cuando súbitamente se trasladó del carril izquierdo al derecho, impactando una verja y, posteriormente, un poste de concreto que cedió con la colisión.

Uno de sus hijos murió en la escena, y ella y el otro menor en el Centro Médico, a donde fueron trasladados para recibir tratamiento.