La División de Delitos contra la Propiedad de Carolina investiga una querella sobre el robo de cinco armas de fuego durante un escalamiento en una residencia localizada en la urbanización Jardines de Palmarejo, en Canóvanas.

A pesar de que la querellante se percató del robo el 1 de mayo, no fue hasta ayer que se radicó la denuncia en el cuartel de Canóvanas.

Alegó que alguien con acceso a la habitación donde guardaba las armas, se apropió de una pistola HK, dos marca Smith & Wesson, una Glock y una Colt, las cuales son de calibres 9 milímetros, .45 y .40, para las que tenía licencia.

No surge del informe de novedades que se hayan apropiado de municiones.