Los asesinatos de dos hombres en Barrio Obrero y Puerto Nuevo, entre el 6 y el 11 de octubre podrían estar vinculados con la masacre de cinco personas cuyos cadáveres desnudos y torturados fueron hallados el 7 de octubre en la barriada Figueroa en Santurce y la avenida Paseo de los Gigantes final, en Carolina, con el sello distintivo del narcotráfico.

Así lo reveló el superintendente de la Policía, Joseph González Falcón, al reaccionar sobre el alza en los asesinatos que se ha observado en las pasadas dos semanas los cuales atribuye al trasiego de drogas. De las estadísticas diarias de la agencia se desprende que el 52% de los asesinatos están relacionados directa o indirectamente con ese motivo.

“Sé que hay mucha especulación sobre las razones para este aumento en los asesinatos en la última semana, desde la lucha entre capos hasta la entrega de drogas a Puerto Rico tras las medidas que todos conocemos entre Venezuela, Colombia y otros países...lo que resulta evidente es que el narcotráfico sigue siendo la principal causa de asesinatos en Puerto Rico...la inteligencia que tenemos es que tiene que ver con un cargamento robado”, sostuvo durante una conferencia de prensa en el Cuartel General de la Policía.

De acuerdo con la información suministrada sobre la secuencia de sucesos, el 6 de octubre a las 7:50 p.m. Héctor Alcántara Domínguez, de 33 años, fue asesinado a puñaladas en el callejón El Niño, en Barrio Obrero, Santurce. Este poseía antecedentes penales por tentativa de asesinato y robo agravado. El crimen fue relacionado, pero no reveló de qué manera pudo haber estado vinculado con el robo de un cargamento de cocaína.

Al día siguiente, a las 3:26 a.m. en la marginal Roosevelt de la Barriada Figueroa en Santurce se localizaron los cadáveres de Nathan Borques, vecino del Embalse San José en Hato Rey y Wilber Javier Germoso Ramírez, de la calle Cortijo en Barrio Obrero, ambos de 18 años. Los cuerpos estaban atados, presentaban golpes y heridas de bala.

A tres de los occisos le cortaron dedos.

Unas cinco horas después, un ciudadano encontró a tres cuerpos molidos a golpes y apilados uno sobre otro, al final de la avenida antes mencionada en iguales condiciones, pero sin impactos de bala. Las víctimas fueron identificadas como Jean Daniel Santana Márquez, de 18 años, un estudiante universitario de Trujillo Alto, Eliezer Derickson Messon de 30 años, de Barrio Obrero y Juan Ramón Pierret de 41 años, estos últimos dos con pasaporte dominicano.

En medio de la compleja investigación de estas escenas con características de carteles de la droga que rompieron con el patrón usual en la isla, el sábado, 11 de octubre, a las 12:04 a.m. fue ultimado a balazos mientras salía de una discoteca en Puerto Nuevo, Eris Espinal de Peña, de 32 años y vecino del residencial Manuel A. Pérez, en Hato Rey. Una joven emprendedora de 23 años, víctima inocente, recibió un balazo en un codo y fue atropellada por los gatilleros. Un hombre resultó herido.

González Falcón, a su vez, acogió la teoría sobre una merma en la cantidad de cocaína que llega a la isla para su distribución hasta Estados Unidos, asegurando que el costo por kilo se ha elevado.

Hace varios meses el kilo de la droga tenía un costo de entre $9,000 a $10,000 y en la actualidad se puede vender entre los $12,000 a $14,000.

Este fin de semana feriado se reportaron diez asesinatos seis de ellos relacionados con directa o indirectamente con el tráfico de sustancias controladas, dos por venganza y uno por una deuda de dinero.

“La Policía de Puerto Rico atacará con firmeza a las organizaciones de narcotráfico más violentas...desmantelaremos sus redes y (los) sacaremos de circulación. Usaremos todos los recursos legales y nuestras alianzas con agencias federales y municipales para llevarlos ante la justicia y devolver (la) seguridad a nuestro pueblo”, sostuvo González Falcón, quien a su vez dijo que su objetivo es atacar a los narcotraficantes de alta escala.

En lo que va de año se han reportado 356 asesinatos, 29 menos que los ocurridos para la misma fecha el año pasado cuando se registraron 385 crímenes. Las áreas policíacas que reflejan un alza en comparación con el 2024 son: San Juan (+7), Ponce (+9), Humacao (+6), Bayamón (+2), Guayama (+2), Utuado (+1) y Aibonito (+2).