El juez Jorge Díaz Reverón, del Tribunal de Primera Instancia de Caguas,  se expone a perder el estrado como juez y su título de abogado por interventir supuestamente  con uno de los posibles testigos en el proceso de acusación que enfrentará su esposa, la relevada secretaria de Justicia, Wanda Vázquez Garced. 

El abogado Arturo Negrón García opinó que a todas luces el caso en el que está involucrado el juez contempla “una gama de penalidades, inclusive la prisión. Está cometiendo delito grave. Va más allá de la violación de los Cánones de Ética”. 

El letrado dijo  que los delitos que podría enfrentar Díaz Reverón son el de influencia indebida y extorsión. 

“Esto es una situación difícil y peligrosa para el sistema judicial. Un pueblo que pierde la fe en la justicia, pierde la fe en la democracia”, sentenció el expresidente del Colegio de Abogados. 

La opinión la emitió luego de que trascendiera que Díaz Reverón citó supuestamente  a su sala del tribunal al policía Javier Marcano Marrero, a quien le instó a cooperar con los abogados de defensa de Vázquez Garced, quien sería acusada mañana por una presunta intervención indebida en una investigación de un escalamiento en la residencia de su hija menor.

Esta acción “evidentemente es una violación crasa de los cánones de ética profesional y judicial”, opinó Negrón García, quien recordó que en dos ocasiones un grupo de abogados de todas las ideologías solicitó sin éxito la remoción de Díaz Reverón de la sala criminal que atiende.

Por su parte, el actual presidente del Colegio de Abogados, Edgardo Román Espada, destacó la importancia de que los jueces mantengan una conducta ética apropiada. 

“Uno de los elementos centrales es su imparcialidad y el no intervenir en asuntos que de alguna manera tiene que ver con su vida personal y familiar. Cuando se dan estas circunstancias, los jueces están llamado a inhibirse y permitir que un juez imparcial se haga cargo”, explicó. 

Comentó que es el Tribunal Supremo de Puerto Rico el que tendrá ahora que pasar juicio sobre las acciones cometidas o no por el juez Díaz Reverón. 

“Una conducta antiética no significará de inmediato la suspensión del juez. Ello debe ser el punto de partida para que la rama Judicial inicie un proceso disciplinario”, comentó. 

Román Espada informó que son pocos los jueces señalados que han terminado expulsados y comentó que la mayoría renuncia durante los procesos éticos. 

Señaló que el más reciente caso ético activo en el  Supremo de un juez es contra el exsenador de Arecibo, José Emilio González, a quien se le imputa hostigamiento sexual. 

“El caso no ha concluido y el  juez no ha sido separado de su posición”, expuso el líder de los abogados, al establecer que el funcionario sí fue cambiado del Tribunal de Aguadilla al de Utuado, en medio de la pesquisa.