El juez federal Pedro Delgado Hernández denegó la petición de una absolución perentoria presentada los abogados de Félix Verdejo el pasado agosto.

Un jurado compuesto por nueve varones y tres féminas determinó 12-0 que Verdejo era culpable de secuestro y asesinato de un menor por nacer.

Keishla Rodríguez Ortiz tenía entre tres y seis semanas de embarazo al momento de haber sido golpeada en el rostro, drogada, amarrada con alambres a un bloque de construcción y, eventualmente, lanzada a la Laguna San José desde el Puente Teodoro Moscoso. Los hechos ocurrieron el 29 de abril y su cuerpo fue recuperado el 1 de mayo de 2021.

El juez Delgado Hernández determinó que, “la evidencia presentada permite que cualquier persona imparcial encuentre más allá de toda duda razonable que la fiscalía demostró los elementos esenciales de los crímenes en las acusaciones dos y cuatro”.

En la solicitud de absolución, los abogados de defensa Gabriela Cintrón y Jason González argumentaron que “no se presentó prueba que demostrara más allá de toda duda razonable que Verdejo-Sánchez mató intencionalmente, o ayudó e instigó al asesinato intencional de un niño en el útero. El señor Verdejo Sánchez solicita respetuosamente a este Honorable Tribunal que decida de pleno derecho que no debió haber sido condenado por el cargo porque incluso después de examinar las pruebas presentadas por ambos partes y sacando todas las inferencias razonables a favor de la fiscalía, ningún jurado razonable podría haber declarado culpable más allá de toda duda razonable del cargo acusado”.

Cintrón, además, cuestionó los relatos que hizo Luis Cádiz Martínez, coacusado por el crimen y el principal testigo del Ministerio Público.

“Cádiz Martínez testificó sobre como él y Verdejo Sánchez, presuntamente, recogieron a Keishla Rodríguez Ortiz en una Durango de Verdejo Sánchez y después de que ella se subió voluntariamente a la Durango, él (Cádiz Martínez) haló a Keishla Rodríguez por el cabello, Verdejo Sánchez le dio un puño en el lado izquierdo de la mandíbula, le inyectó heroína que había comprado y puesto en la jeringa y, luego, ató las extremidades de su cuerpo con alambre de metal”, reza el documento.

“Cádiz Martínez testificó además que condujeron en el Durango hasta el Teodoro Puente Moscoso y arrojó el cuerpo a la Laguna San José. Suponiendo que sea cierto el testimonio de Cádiz Martínez, sus declaraciones y el relato de los acontecimientos carecen por completo de fundamento y no están corroborados”, continúa.

El juez Delgado Hernández respondió que “las disputas de credibilidad fueron resueltas a favor del veredicto”.

La vista de sentencia está en agenda para el 3 de noviembre. Verdejo se expone a una cadena perpetua.