La jueza Vivian Durieux declaró no ha lugar la moción de disolución del jurado presentada por la defensa en el juicio contra Ricardo Ocasio Reyes, el exchofer de la Oficina de Administración de Tribunales acusado de matar a dos personas y herir a otras dos como parte de un crimen de violencia de género.

El abogado Pedro Sanabria, de la Sociedad para Asistencia Legal (SAL), quien entendía que el jurado debía disolverse por "irregularidades" cometidas en las pasadas cuatro semanas de juicio, anticipó que recurrirá la decisión adversa de la jueza ante el Tribunal de Apelaciones en los próximo días.

La fiscal Paulette Lartigaut Benítez, quien junto a Mibari Rivera Sanfiorenzo representa al Ministerio Público, negó cualquier irregularidad.

 "Que deje de usar subterfugios y permita que continúe el juicio", reclamó la fiscal a la jueza.

Los hechos ocurrieron el pasado 22 de septiembre en una gasolinera de Bayamón. Al acusado se le imputa asesinar a su expareja, Griselle Santiago Galíndez, a un sujeto no relacionado con la mujer de nombre Nelson Amaury Vizcarrondo. Ocasio Reyes está acusado de dos asesinatos, tentativas de asesinato e infracciones a la Ley de Armas y a la Ley de Violencia Doméstica.

Sanabria argumentó que el jurado se debía disolver -lo que implica la celebración de un nuevo juicio- porque el Ministerio Público no le entregó evidencia necesaria para prepararse adecuadamente y realizar los contrainterrogatorios.

 Además, dijo, testigos han hecho expresiones inflamatorias frente al jurado.

El abogado expresó que la evidencia que no le entregaron eran estudios del Instituto de Ciencias Forenses (ICF), como un análisis de trayectoria de los disparos. A pesar de que las fiscales dijeron que no se preparó, expuso el abogado, el informe estaba listo desde el pasado 25 de octubre y se le entregó a la defensa en medio del juicio porque la jueza emitió una orden al ICF.

La otra evidencia eran fotos y un vídeo que, según el abogado, al no tenerlas no pudo hacer contrainterrogatorio efectivo a varios testigos de fiscalía.

"Todo es como una mano invisible que le da "delete" a lo que no le conviene... el Estado está siendo negligente e irresponsable. ¿Dónde está la evidencia? Me la escondieron", indicó Sanabria.

Las supuestas expresiones inflamatorias ante el jurado vinieron del papá de Amaury Vizcarrondo -su nombre no fue precisado- quien, a pesar que no presenció el crimen: "señaló a mi cliente para decir que mi cliente asesinó a su hijo".

Las otras expresiones fueron del testigo y sobreviviente del tiroteo, Ángel Echevarría, cuando dijo ante el jurado que Ocasio Reyes "me está mirando" en medio del juicio. Para el abogado, lejos de esa mirada representar una amenaza, la realidad es que un acusado puede mirar a un testigo como parte del derecho constitucional al careo.

"Todo es parte de un teatro que está ejecutando el Estado", indicó Ocasio Reyes.

La fiscal dijo que en tres ocasiones trataron de entregarle sin éxito las fotos y vídeo al abogado, y que nunca la defensa precisó los informes a los que se refería.

La jueza ordenó la continuación del juicio esta tarde. El próximo testigo anunciado por el Ministerio Público es el agente de homicidios, Jesús M. Alicea.