Le imputan un cuarto crimen a joven apodado Perro
El hombre de 30 años fue excarcelado este lunes para enfrentar cargos por la muerte a tiros de Héctor Manuel Gómez Correa.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 11 años.
PUBLICIDAD
A un hombre que está acusado de tres crímenes y quien además ha sido implicado en una balacera en la que perdió la vida una joven embarazada en Caguas se le formularon cargos por un cuarto asesinato, según confirmó hoy la Policía.
Se trata de José Luis Rodríguez Verdejo, apodado Perro. El hombre de 30 años fue excarcelado este lunes para enfrentar cargos por la muerte a tiros de Héctor Manuel Gómez Correa, reportada el 3 de agosto de 2012, en la comunidad Turabo Arriba, en Caguas.
El crimen fue investigado por el agente de Homicidios Francisco Cortés y presentado por el fiscal José Carrasquillo ante la jueza Sonya Nieves, quien encontró causa para arresto contra Rodríguez Verdejo, le impuso una fianza de $1 millón y ordenó su reingreso a prisión.
Rodríguez Verdejo figura como coacusado en otros tres asesinatos, todos ocurridos en el 2012.
El primero ocurrió el 1 de abril de ese año, cuando supuestamente conspiró con un individuo conocido como Moña y con José Gómez López, alias Coco, para matar a Miguel Carrillo Delgado en el barrio Cañaboncito, de Caguas.
El 31 de julio, según las autoridades, Rodríguez Verdejo conspiró con Julio A. Miranda Cortés, alias Fresa y Christian Rodríguez Rivera, conocido como Gran Danés, para ejecutar a Walter García Figueroa, en la barriada Villa Alegre, de Gurabo.
Luego, el 16 de agosto, supuestamente mató junto a Gómez López y Miranda Cortés a Víctor M. Alamo Caraballo, a quienes secuestraron frente a un almacén en el barrio Navarro de Gurabo y lo abandonarlo herido de bala en San Lorenzo.
Rodríguez Verdejo, Rodríguez Rivera, Julio Morán Pastrana, alias Safari e Iván Orlando Oliveras Cruz fueron acusados por conspirar para intentar matar a Félix Jamil Díaz Hernández el 4 de julio pasado, cuando perdió la vida Angeliz Carrasquillo Rosado, de 19 años, quien estaba embarazada. Sin embargo, esos cargos luego se le retiraron. La joven asesinada a tiros fue identificada como novia del sujeto que procuraban ultimar los pistoleros que protagonizaron la balacera de carro a carro.
Esa acusación no prosperó ante la negativa de Díaz Hernández de declarar en contra de los sicarios, supuestamente porque no podía identificarlos en un tribunal. Por eso, el Departamento de Justicia retiró los cargos contra el cuarteto sospechoso, pero Félix Jamil fue acusado por violación a la Ley de Armas y Sustancias Controladas, ya que la noche de la balacera en la que pereció Carrasquillo Rosado le ocuparon en su automóvil 78 bolsas de marihuana y 75 de cocaína, una pistola marca Glock, calibre 9 milímetros, con su cargador, un tambor con 50 balas y otro cargador con 30 municiones.