Cargos criminales en ausencia fueron radicados durante la noche de ayer, martes, contra Rey Giovannie Oquendo Guevarez, alias Bin Laden, por los delitos de robo agravado y violación a la Ley de Armas por un “carjacking” ocurrido el 4 de mayo en la urbanización Ciudad Universitaria en Trujillo Alto.

La jueza Lirio del Mar González Bernal, del Tribunal de Carolina, expidió una nueva orden de arresto en su contra con una fianza de $1.2 millones.

Los hechos que se le imputan ocurrieron a las 10:54 p.m. cuando el individuo armado asaltó a una conductora que transitaba por el lugar con varios niños en una guagua Kia Sportage, color gris del 2015 y hasta disparó. No se reportaron heridos.

El vehículo fue recuperado quemado el 14 de mayo en el barrio Sonadora en Aguas Buenas, informó el director del Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) de Carolina, inspector Carlos Nazario Lebrón. 

El caso fue investigado por el agente Ángel Cruz Soto, adscrito a la División de Robos del CIC de Carolina.

Oquendo Guevarez, de 25 años, natural de Toa Alta e hijo de una agente del Negociado de la Policía junto Kelvin Joel Meléndez Colón, de 29 años, son considerados por las autoridades federales como sospechosos de estar involucrados en el crimen del policía municipal de Manatí José Marrero Martínez de 37 años, durante un intento de “carjacking” ocurrido durante la madrugada del sábado pasado en la carretera PR-686 frente al bar La Taberna en el barrio Puerto Nuevo en Vega Baja.

Contra Oquendo Guevarez pesan otras tres órdenes de arresto con una fianza de $1 millón 250 mil por los delitos de robo agravado, violación a la Ley de Armas y uso de un disfraz en la comisión de un delito por hechos ocurridos entre agosto y septiembre del año pasado.

También es sospechoso de cometer una veintena de asaltos hasta en el área sur.