Más de 100 arrestados por narcotráfico - VÍDEO
El operativo fue mayormente en la barriada Morales, en Caguas, y en los pueblos de San Lorenzo, San Juan, Cidra, Aguas Buenas y Bayamón.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
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La fiscalía federal proclamó la muerte de una organización de narcotraficantes con sede en la barriada Morales en Caguas, a la que se le achacan ventas de sustancias ilegales por aproximadamente $74 millones entre el 2005 y el 2013, y más de 28 asesinatos relacionados al narcotráfico.
Autoridades estatal y federal, operando en tierra y en aire con aviones y helicópteros, irrumpieron este miércoles en la mañana en la barriada Morales y en otros municipios para intentar atrapar 112 personas ligadas presuntamente a la organización dirigida por Julio Hernández Cruz, alias Pito Uva.
El pasado 15 de agosto, un gran jurado autorizó la presentación de cargos por conspirar para poseer narcóticos a integrantes de la pandilla de la barriada Morales, entre otros delitos relacionados al narcotráfico.
En este operativo conjunto se diligenciarían 74 órdenes de arresto en la barriada Morales y 25 en los municipios de Aguas Buenas, Cidra, Bayamón, Humacao, San Juan y San Lorenzo.
Otras 14 personas, entre los que figuran los hermanos Jaime, alias Peluche, y Jason Dávila Reyes, se encuentran detrás de las rejas, más 13 personas fueron acusadas, pero se desconoce su dirección.
A las 3:30 p.m. de este miércoles, se habían detenido a 87 personas, incluyendo a los 14 que están presos.
Todos los acusados enfrentan entre 10 años y vida en cárcel.
La jefa de fiscalía federal, Rosa Emilia Rodríguez, y el jefe de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), Carlos Cases, confirmaron que el operativo guarda relación con otras intervenciones ejecutadas este mes en los caseríos Brisas del Turabo, Turabo Heights y Gautier Benítez, todos en Caguas.
Son 265 acusados de narcotráfico en el foro federal en lo que va de mes en Caguas.
"Esta es una ganga extremadamente violenta", indicó Rodríguez al precisar que la organización contaba con más de 50 gatilleros que enfrentan cargos por posesión de armas de fuego al cometer delitos relacionados al narcotráfico. No se brindaron detalles sobre uno solo de los 28 asesinatos, dato que usualmente desfila en corte.
La fiscal brindó algunos detalles de las alegadas operaciones de la organización. Por ejemplo, mencionó que contaba con puntos en la barriada Morales llamados: Uva, Rosas, China, Las Negras, Azules, Kilates, Simpsons o Las Blancas. En estos se vendía crack, heroína, cocaína, marihuana, y pastillas Xanax y Percocet.
La fiscal federal indicó que los delincuentes acordaron en estos diferentes puntos de la barriada Morales mantener los mismos precios por estas sustancias como estrategia para evitar la competición y los asesinatos dentro de la comunidad.
Rodríguez mencionó que las personas que controlaban los puntos de venta de las sustancias controladas acostumbraban regalar "muestras" a usuarios a modo de promocionar la calidad del producto.
Según se explicó, gatilleros se beneficiaban de dueños de concesionarios de autos que les prestaban automóviles que recibían de 'brokers' para ser vendidos a cambio de una comisión. Los gatilleros cometían el delito, en ocasiones tiroteos de carro a carro o 'drive-by' y si el vehículo no sufría daños, lo devolvían al concesionario.
A pesar de múltiples preguntas, Rodríguez no precisó cuántos concesionarios participaron del esquema. Dijo que la investigación continúa.
Los gatilleros, según se desprende de la pesquisa, cobraban $500 semanales y los vendedores recibían una especie de bono navideño que oscilaba entre $200 y $250, "dependiendo de la generosidad del dueño del punto", dijo Rodríguez.
El punto de venta de drogas en la barriada Morales, ubicada a pasos de la nueva Comandancia de la Policía en Caguas, contaba con cinco puntos de vigías: Torres 1 a la 4 y otro lugar llamado Avenida. Allí velaban a la oposición con armas cortas de día y rifles de alto poder en las noches, según Rodríguez.
Los dueños del punto impartían disciplina en el lugar rompiéndole los brazos a los indisciplinados con palos de hachas, afirmó la fiscal federal.
El operativo de diligenciamiento de órdenes de arresto contó con la participación del FBI, la Policía, la Agencia Federal Antidrogas (DEA), la Agencia de Control de Tabaco y Armas de Fuego (ATF), Inmigración y Control de Aduanas (ICE), los Alguaciles Federales y el Municipio de San Juan.
De hecho, Rodríguez resaltó la labor de una agente investigativa del municipio sanjuanero en la pesquisa, dirigida por los fiscales Alberto López Rocafort, Víctor Acevedo y Teresa Zapata Valladares.
El superintendente de la Policía, Héctor Pesquera, se encontraba en la conferencia de prensa convocada por la fiscalía federal. A preguntas de este medio, minimizó el hecho de que esta organización operó por al menos dos años impunemente a paso de la Comandancia de Caguas.
"Esto pasa todos los días. Los puntos están identificados, pero hay que construir los casos. No se puede procesar de la noche a la mañana. Lo importante es que se atrapó a cincuenta y pico de gatilleros. Las iniciativas siguen dando dividendos", dijo Pesquera.