Más neutrales los candidatos a jurado en caso contra Pablo Casellas
Estos candidatos a jurados forman parte del segundo grupo de paneles citado para el caso en el Tribunal de Bayamón.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
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Conflictos en el trabajo y alegatos de una posición "neutral" en torno a la inocencia o culpabilidad de Pablo Casellas Toro dominaron hoy la ronda de preguntas personales que realizó el abogado Harry Padilla Martínez en la continuación de la selección del panel de ciudadanos que determinará si el corredor de seguros es culpable o no culpable del asesinato de su esposa Carmen Paredes Cintrón.
Pero contrario a paneles previos que opinaban de forma mayoritaria que Casellas Toro era culpable de la muerte de su compañera de vida, los hombres y mujeres que llegaron a la sala 706, que preside el juez José Ramírez Lluch, adoptaron una posición menos adversa al acusado.
Estos candidatos a jurados forman parte del segundo grupo de paneles citado para el caso en el Tribunal de Bayamón. Primero se citaron siete paneles, luego se citaron siete paneles adicionales y para el 12 de noviembre se citaron seis paneles nuevos.
Cada panel está compuesto por 14 personas, mientras que el jurado quedará compuesto por 12 personas y dos o tres jurados suplentes.
Una empleada administrativa del Tribunal de San Juan afirmó que pensaba que el hijo del juez federal Salvador Casellas era culpable, pero que cambió de postura "cuando llegué aquí y lo miré".
Afirmó que de votar hoy y sin conocer la prueba del Ministerio Público votaría que el hombre es "inocente".
No está sola. Una enfermera anestesista también indicó que su posición ha evolucionado desde que arribó al proceso de selección de jurado.
"Mi posición ha variado hacia más neutral", indicó.
Otro empleado en una mueblería señaló que no lo consideraba ni inocente ni culpable y un ebanista se pronunció neutral en torno a la inocencia o culpabilidad del acusado, quien se encontraba sentado al lado de sus abogados Juan Ramón Acevedo Cruz y Arturo Negrón García.
El empleado de la mueblería, la enfermera, una profesora de enfermería y una maestra de segundo grado expresaron preocupación por el impacto que participar en el jurado tendría sobre su trabajo.
La maestra de segundo, por ejemplo, señaló que no tenía quien la sustituyera en la escuela y que los días que ha venido al centro judicial sus estudiantes no han tenido clase.
Luego de entrevistarla frente al estrado, el juez Ramírez Lluch le indicó que le servía mejor al País en el salón de clases que participando del proceso judicial.
La enfermera anestesista, quien ha expresado su interés en formar parte del jurado, apuntó que si no trabaja no cobra.
A preguntas de Padilla Martínez detalló que tiene una hija pequeña y que vive con su mamá, que está incapacitada.
Una oficial de ejecuciones hipotecarias, quien aseguró que de retirarse a deliberar no votaría porque no había escuchado la prueba, expresó que los abogados son un "mal necesario" y que en ocasiones no entendía cómo abogados defendían casos "indefendibles".
También favoreció la pena de muerte e indicó que le parecía bien que ahorcaran a un hombre si lo habían cogido en el acto mientras violaba a una niña.
Pero en un giro inesperado, el juez preguntó a la candidata a jurado que si respondía lo que creía o lo que le había dicho un supervisor.
"Lo que yo creo", respondió la mujer, quien dirigió una carta al juez donde documentó un acercamiento de su superior.
Según indicó la oficial de ejecuciones bancarias, una supervisora suya le hizo un acercamiento que entendía que violaba la Ley y por ello envió la misiva al juez Ramírez Lluch. De sus respuestas, se desprendió que su superior pareció sugerirle contestaciones para evitar ser seleccionada.
Ante la situación, el magistrado se reservó el derecho de remitir la carta al Departamento de Justicia.
A su salida de sala, el licenciado Padilla Martínez reconoció que a los patronos no les simpatiza tener empleados como jurados porque le tienen que ofrecer una compensación mientras no está laborando.
"Lo que a mí me preocupa es que se vaya a dar el caso de que los patronos hagan sugerencias que son incorrectas, es decir ilegales, de forma tal que el jurado pueda hacer unas expresiones en sala que le promueva y le permita salir de ser un potencial jurado cuando realmente está dando una versión que no corresponde a la realidad", indicó el letrado.
El fiscal Sergio Rubio, quien representa al Ministerio Público junto a las fiscales Phoebe Isales y Janet Parra, por su lado, indicó que los potenciales jurados reciben el pago de dieta y millaje y que no pueden ser despedidos por servir como jurados. En caso de un despido, un patrono se expone a sanciones de Ley.
El proceso sigue el jueves.