La jueza presidenta de la corte federal, Aida Delgado Colón, ordenó este lunes, que se use el mecanismo de circuito cerrado para el testimonio de un niño de 10 años presunta víctima de abusos sexuales por parte de Randy Charriez Rolón.

Durante una vista de status de los procedimientos este lunes, el abogado de Charriez Rolón, Miguel A. Rodríguez Robles, se opuso a la orden alegando inconsistencias de los testimonios de la madre y un médico relacionados a la petición de circuito cerrado. Sin embargo, la jueza Delgado Colón entendió que el sistema de circuito cerrado le da suficientes garantías al acusado.

“Usted podrá contrainterrogar al perjudicado, usted podrá ver su comportamiento”, dijo la jueza Delgado Colón al ordenar el uso de circuito cerrado.

Charriez Rolón, de 29 años y residente en Toa Baja, fue arrestado en marzo por agentes de la Oficina de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI) por cargos de tráfico sexual de menores y transportar un menor con la intención de prostituirlo.

Según la fiscalía, al momento de los hechos la víctima tenía entre 9 y 10 años. Además, el acusado presuntamente grabó parte de los actos sexuales con el niño y lo mostró a unos amigos, que se burlaron del menor. 

La jueza Delgado Colón no dio fecha exacta para el juicio contra Charriez Rolón, pero estimó que será la primera semana de febrero de 2015.

Antes de que Delgado Colón pautara preliminarmente el juicio para febrero, el licenciado Rodríguez Robles pidió “un tiempo adicional” para evaluar testimonio pericial médico. La jueza lo denegó.

El fiscal del caso, Marshal D. Morgan, dijo que la presentación de la prueba de cargos contra Charriez Rolón durará unos cuatro a cinco días, y cuenta con unos nueve a 11 testigos, incluyendo los padres, dos hermanos y la abuela de la víctima, para declarar sobre el comportamiento en la comunidad del acusado.

Asimismo, Morgan dijo que estaría entregando mañana, martes, un disco compacto con documentos adicionales al licenciado Rodríguez Robles.

La defensa al momento no tiene testigos, dijo el abogado.

El acusado, quien no fue traído hoy a sala, anunció en octubre pasado que no se declarará culpable. El juicio será por jurado.

Según la denuncia federal contra el acusado, la División de Delitos Sexuales de la Policía de Puerto Rico de Bayamón informó a agentes del ICE-HSI sobre una querella contra Charriez Rolón, quien se alega llevaba al menor desde su escuela hasta un parque cercano en Toa Alta y al estacionamiento de una piscina para sostener actos de conducta sexual ilícita dentro de una guagua, bajo amenaza y ofreciendo regalos al menor. 

De acuerdo a las autoridades, el niño relató que un día fue a la casa de Charriez Rolón y llegaron los amigos del hoy imputado. El hombre les mostró el vídeo en el que agredía sexualmente al menor, y los amigos comenzaron a decirle sobrenombres, a reírse de él. Poco después, los amigos del acusado le quitaron la camisa, lo pegaron contra una pared y comenzaron a pegarle con una correa. El imputado procedió a abusar del niño mientras los amigos grababan el acto. 

En otra ocasión, Charriez Rolón le mostró películas pornográficas y le decía que le compraría cosas a cambio de poder cometer los actos. Igualmente, le apuntó con un arma y le dijo que lo mataría si no lo dejaba tocarlo.

Los agentes también entrevistaron a la hermana del presunto perjudicado, de 14 años, quien confirmó que Charriez Rolón le regalaba videojuegos, ropa, zapatos, relojes y gafas a su hermano. 

Charriez Rolón, quien residía en el barrio Quebrada Cruz de Toa Alta, enfrenta una condena de cárcel de entre 10 años de cárcel y cadena perpetua