Vanessa Ríos Negrón podría declararse culpable por transportar a una menor de edad para prostituirla y tener relaciones sexuales con ella.

Esta mañana la mujer de 30 años estuvo presente en la sala ante el juez Juan Pérez Giménez en el Tribunal Federal en Viejo San Juan en la cual el fiscal Marshal D. Morgan informó que entregó este viernes las piezas de evidencia del caso al abogado Giovanni José Canino, de la Oficina del Defensor Público federal.

Morgan detalló que el descubrimiento de prueba consta de 39 páginas de reportes, incluyendo recibos de los hoteles donde llevó a la adolescente mientras tenía 14 y 15 años, pero aclaró que la mayoría de la prueba es testimonial.

Durante la vista, el juez advino en conocimiento de que el coacusado en este caso, Juan "Berto" Matos González, llegó a un acuerdo con la fiscalía federal para declararse culpable y que en el caso de Ríos Negrón también hay conversaciones para un posible acuerdo, por lo que informó que la semana que viene pautará una vista de cambio de alegación para ambos.

En mayo pasado, Ríos Negrón fue arrestada en Orlando, Florida, y Matos González en Ponce por hechos ocurridos entre 2011 y 2012, cuando la menor tenía entre 14 y 15 años.

Según la denuncia, agentes de la Oficina de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-HSI) entrevistaron a la adolescente el 24 de abril pasado, y esta declaró que conoció a Ríos Negrón en casa de su tía, donde residió por un tiempo. Fue entonces que la abrazó y besó "de forma amorosa" y luego sostuvieron múltiples encuentros de índole sexual en distintos lugares, como el motel Nuevo Camino y el Holiday Inn Hotel, en Ponce.

Ríos Negrón le planteó que pensaba mudarse a Estados Unidos, pero que necesitaba dinero, y le dijo que Berto estaba dispuesto a pagarles $200 por verlas mientras sostenían relaciones sexuales entre ellas. El 28 de febrero de 2012, fueron al Holiday Inn y se consumó el acto, pero el coacusado no se limitó a mirar y sostuvo relaciones sexuales con la menor. Les pagó $200 a cada una.

Una vez Ríos Negrón se mudó a Florida, la adolescente le dijo que necesitaba dinero y la acusada le dijo: "Tú sabes qué tienes que hacer, llama a Berto", y así lo hizo.

Tiempo después, la menor regresó a vivir con su madre y fue entonces que comenzó a tener pesadillas y ataques de ansiedad.

De ser encontrados culpables, los acusados se enfrentan a un mínimo de 15 años de cárcel o hasta cadena perpetua.