Una mujer imputada de grabar un vídeo mientras presuntamente cometía actos de índole sexual con su hijo de 11 años renunció ayer a la vista preliminar por un cargo federal de producción de pornografía infantil.

Ayer en la mañana debía verse el proceso contra Marisol Rivera Casillas ante el magistrado federal Bruce McGiverin. Sin embargo, Rivera Casillas informó a través de su abogado John Connors, de la Oficina del Defensor Público Federal, que renunciaba a la vista. El magistrado McGiverin le recalcó que ahora el fiscal Marshal D. Morgan podría presentar el caso ante un Gran Jurado para una acusación formal en su contra.

En la sala, estuvieron presentes dos parientes de la mujer que no quisieron identificarse. Una de ellas se limitó a decir que “claro que sí, si es mi sobrina”, cuando se le preguntó si cree en la inocencia de Rivera Casillas.

Según la denuncia de agentes de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Interna del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE-HSI, por sus siglas en inglés), la mujer de 36 años cometió los actos en noviembre de 2012, cuando grabó dos vídeos de su hijo menor con su teléfono celular. En el primero, se ve a la madre y al niño en medio de un “acto sexual o aparente acto sexual”, ella desnuda y él en pantalones cortos. En la segunda grabación, se observa al menor brincar de la cama y gritar “¡Ma!”, mientras trata de esconder sus partes íntimas.

Fue la Policía de Puerto Rico la que denunció la información a la agencia federal el 31 de mayo pasado, y entregó un DVD con ambos vídeos. Al llevar a cabo una orden de allanamiento en su residencia en Cataño, supuestamente la mujer admitió los hechos.

Inicialmente, las autoridades federales habían informado que el menor tenía nueve años.