La Policía en el área de Mayagüez todavía trabaja en el examen del automóvil en que se encontró el sábado en la noche el cuerpo de Francisco Miranda Rosa, un hombre de 45 años que fue encontrado asfixiado con unas tiras de plástico alrededor del cuello y que se presume que fue víctima de un robo.

Miranda Rosa, vecino del barrio Lagunas, en Aguada, salió a eso de las 7:00 a.m. del sábado de su residencia para comprar una pieza para un equipo agrícola propiedad de un amigo. Según explicó el teniente Joel González, jefe de Homicidios en Mayagüez, la última comunicación entre Miranda Rosa y su familia fue a eso de las 8:00 a.m. cuando llamó por teléfono a su esposa.

Miranda Rosa estaba pensionado y formaba parte de un consejo de seguridad en Aguadilla. Su familia fue entrevistada ayer en la Comandancia de Mayagüez y, según el oficial, se encuentran perplejos ante su muerte y no han podido aportar alguna posible teoría que ayude a encaminar la pesquisa.

Miranda Rosa salió de su casa en su vehículo Toyota Corolla y el mismo fue encontrado a las 7:30 p.m. por un individuo que lo divisó entre la maleza en la carretera PR-2, jurisdicción de Sabana Grande. En el baúl se encontró el cadáver de Miranda Rosa, quien sangraba por la nariz, lo que lleva a la Policía a teorizar que posiblemente ocurrió un forcejeo en el interior del auto.

Lo que no saben es en qué circunstancias el hombre fue interceptado por el o los responsables de su muerte. También se desconoce si el hombre pudo llegar al negocio donde se suponía que comprara la pieza. De hecho, se desconoce el nombre del local.

 Por lo pronto, la Policía continuará realizando diferentes pruebas en el vehículo. También solicitarán los registros de llamadas telefónicas del celular de su víctima y su historial bancario. Ni la billetera, ni el teléfono de la víctima aparecen.