La comisaría auxiliar de Investigación Criminal confirmó que recibieron hoy el informe del Laboratorio de ADN del Instituto de Ciencias Forenses sobre los análisis realizados a varias piezas de evidencia ocupadas en la escena del crimen de la líder comunitaria de Río Piedras, Nilda Álvarez Lugo, de 64 años, ocurrido el 13 de noviembre del año pasado en su apartamento del condominio Balseiro Elderly, en Río Piedras.

El comandante Wilson Lebrón indicó que los investigadores estarán reuniéndose próximamente con la fiscalía de San Juan para discutir los hallazgos. No reveló si la prueba es suficiente para la radicación de cargos criminales en esta etapa.

Se estima que se enviaron para su análisis más de una decena de piezas de evidencia para que una vez se obtengan los resultados procedan a realizar las pruebas comparativas con el sospechoso, del cual se podría tener su ADN guardado, para acusarlo.

“Se confirma que se recibieron los documentos del Instituto de Ciencias Forenses…no revelaremos su contenido porque esa es parte de la investigación”, declaró Lebrón por escrito.

Por su parte, la directora del ICF, Dra. María Conte Miller, recalcó en declaraciones escritas, la rigurosidad con la que se realizan los análisis de la evidencia.

“En el día de ayer (lunes) el Laboratorio de ADN presentó su informe pericial del análisis de la evidencia del caso de Nilda Álvarez. Es importante destacar que el Instituto de Ciencias Forenses tiene el deber de analizar la evidencia de cada caso, con el mayor rigor y cumplimiento de los estándares de calidad de los más prestigiosos organismos reguladores y aunque ese análisis toma un tiempo completarlo, este es un proceso dinámico. Según se van obteniendo resultados se comunican periódicamente a fiscalía y los agentes investigadores para que estos a su vez, puedan encaminar la investigación mientras se rinde el informe final del análisis de la evidencia”.

Al inicio de la pesquisa el Cuerpo de Investigación Criminal (CIC) de San Juan confirmó que se había identificado a una persona de interés que podría tratarse de una persona sin hogar.

Durante el transcurso de la investigación se dio a conocer que en la escena se ocupó una gorra y a una pieza de ropa, que se presume son del sospechoso para fines de establecer su conexión con la escena.

Además, se examinó un cuchillo de su propio set de cocina y otras muestras de ADN levantadas en la escena, como huellas de calzado.

Se sospecha que el asesino entró y salió del condominio por las escaleras ya que también allí se levantaron manchas de sangre.

Como parte de las gestiones investigativas se llevó a cabo el rastreo de su teléfono celular que fue robado de la escena.

De acuerdo con la investigación la pareja de la pensionada fue quien la encontró muerta en el piso de la habitación tras acudir a su hogar preocupado porque durante varias horas no había respondido a sus llamadas. Al entrar en el apartamento del cual tenía llave encontró su cuerpo ensangrentado al lado de la cama.

Como signos de violencia tenía una herida abierta en la frente, contusiones en los ojos, boca y el lado derecho del rostro. También tenía unas piezas de ropa enrolladas en el cuello.

Varias vigilias para reclamar que se haga justicia por este asesinato que mantiene consternada a esa comunidad se han llevado a cabo.