Caguas.- La vista preliminar contra Félix Jamil Díaz Hernández, esposo de la joven embarazada que murió en medio de una balacera el pasado 4 de julio, no se celebró la mañana de hoy porque la defensa no se encontraba preparada para el inicio del proceso.

Ante la jueza Lourdes Robles Torres, el abogado por designación de oficio William Yamil Maisonet Piñero explicó que no había podido entrevistar al hombre, de 22 años, porque no había sido traído al centro judicial el pasado 10 de febrero.

Maisonet Piñero también solicitó ser relevado del caso por dos razones. Indicó que se especializaba en la práctica del derecho civil y no criminal. Además, señaló que había surgido un planteamiento de posible conflicto de interés porque conocía al agente César Velázquez, testigo del Ministerio Público.

La togada escuchó los planteamientos del letrado, pero rechazó relevarlo del caso.

"No tengo duda de sus capacidades", afirmó durante un intercambio entre las partes ante su estrado.

La fiscal Cristina Caraballo Colón, por su parte, apuntó que se encontraba lista y expresó preocupación porque las dilaciones en la vista preliminar afecten los términos para la celebración de un juicio rápido.

Durante el debate en sala, el imputado permaneció en una celda del centro judicial. Pese a que la jueza insistió en su presencia, el traslado del imputado se atrasó porque no estaba el alguacil, que custodia la llave de la celda.

Este medio había denunciado que las salas de vista preliminar del nuevo y ostentoso Tribunal de Caguas no cuentan con un área para sentar a los imputados. La situación provoca retrasos en los procesos, según ha presenciado este medio, pero también viola el derecho al debido proceso de Ley que cobija a los imputados de delitos, han alertado los abogados.

Eventualmente Díaz Hernández arribó a la sala 202 y escuchó a la jueza decir que el proceso no se vería porque su abogado no estaba preparado.

También le indicó que el abogado lo entrevistará los días 20 y 27 de febrero y que la vista preliminar se celebrará el 16 de marzo a las 10:00 a.m.

Díaz Hernández enfrenta cuatro cargos por violación a la Ley de Armas por poseer una pistola, piezas de un arma y municiones para las cuales no tenía permiso. También encara una violación a la Ley de Sustancias Controladas por posesión de marihuana y cocaína.

La pistola, las piezas, las municiones y las drogas se encontraban en el vehículo que conducía el imputado el pasado 4 de julio y que estuvo involucrado en la balacera donde murió su pareja Angeliz Carrasquillo Rosa.

Carrasquillo Rosa, de 19 años, viajaba como pasajera en un automóvil cuando otras personas abrieron fuego desde un vehículo en marcha en la intersección de calle Garrido y la carretera PR-1, en Caguas.

Como resultado de la balacera, la mujer recibió heridas en la cabeza, la espalda y el costado derecho, mientras que Díaz Hernández abrió la puerta y salió corriendo hacia un restaurante de comida rápida hasta donde lo persiguieron los atacantes, según las autoridades.

Las balas también alcanzaron al hombre en la espalda, la pierna derecha y un brazo.

Carrasquillo Rosa falleció, pero los médicos lograron salvar a su bebé.

Por la muerte de la mujer, el Ministerio Público presentó denuncias contra varios imputados, pero posteriormente ordenó el archivo de los cargos.

La fiscal Caraballo indicó a este medio que ese caso se encuentra "bajo investigación, pero no activo".