La policía de Las Vegas arrestó a Jason “Blu” Griffith, ex novio de la bailarina puertorriqueña que desapareció en las navidades, y le imputó la muerte de Deborah “Debbie” Flores-Narvaez, de 31 años, tras confirmarse el hallazgo de sus restos.

El canal 3 de la televisión local reportó que el arresto ocurrió el sábado gracias a una confidencia que recibió la Policía y hoy se confirmó que los restos hallados en la casa de Griffith eran los de la desaparecida hace un mes.

Los restos de la joven bailarina exótica fueron encontrados enterrados en una bañera llena de concreto dentro de casa del sospechoso, en la misma ciudad. Según el reporte de la televisora local, parece que el cuerpo fue desmembrado.

La última vez que se vio a la mujer fue el 12 de diciembre. Griffith dijo a la policía que ella pasó por su casa esa noche.

Los compañeros de trabajo de Debbie expresaron preocupación por su paradero cuando no se presentó a trabajar en el espectáculo burlesco del hotel Luxor, titulado “Fantasy”.

Griffith y Flores Narváez tuvieron una relación por un año, que terminó poco antes de la desaparición de ella. La Policía dijo que la relación se había tornado violenta y que él fue arrestado luego de un incidente en que Griffith la empujó estando en la casa de una ex novia. En ese suceso, ocurrido en octubre pasado, se reveló que Flores Naváez estaba embarazada.

El teniente de la Policía Lew Roberts catalogó la investigación de este asesinato como “algo complicada” y anticipó que arrestarían más personas sospechosas, aunque anunciaron que tenían suficiente evidencia para radicar cargos contra Griffith.

El lunes estaba previsto que el resultado de la autopsia revelara la causa de muerte.

Mientras tanto, los amigos de la víctima expresaron estar en shock por la forma en que murió su amiga.

“Yo sabía que algo había pasado. No tenía idea de ese grado”, dijo el socio de negocios de Debbie, René Delgadillo. “Es simplemente horrible que alguien haga algo así a otro ser humano”.
“Es una vergüenza que alguien tome la vida de otro de esa manera. Ella no se merecía nada de eso… Nadie merece ser básicamente torturado”, agregó.

Celeste Flores Narváez, hermana de Debbie, dijo a News 3 que no tenía palabras para Griffith.

Griffith, quien había estado cooperando con las autoridades, tenía programada una comparecencia en el tribunal el mes pasado por un cargo de violencia doméstica relacionado al ataque de octubre a Flores Narváez. Las autoridades alegan que él la empujó al suelo, la pateó y le aló el pelo después de arrancarle el teléfono.

La bailarina y ex porrista de la NFL envió un siniestro mensaje de texto a su mamá menos de dos semanas antes de desaparecer, en el cual decía: “En caso de que ocurra alguna emergencia conmigo, contacta a Blu Griffith en Vegas. Mi ex novio. No mi mejor amigo”.