La jueza Irmarie Colón Massó, del Tribunal de Fajardo determinó ayer causa para arresto contra un adolescente de 16 años al que se le radicaron faltas y un adulto de 21 años, por un “carjacking” ocurrido durante la mañana del domingo en la calle 10 de las Parcelas Fortuna en Luquillo, lo que desató una extensa y violenta persecución.

Contra un tercer presunto implicado de 18 años, no se encontró causa para arresto, informó el inspector Jesús Cruz, director del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Fajardo.

De la investigación realizada por el agente Jonathan Serrano Martínez bajo la supervisión de la sargento Glenda Méndez, adscritos al CIC de Fajardo, se desprende que la querellante, una mujer de 75 años, el Día de los Padres a eso de las 10:58 a.m. mientras se disponía a salir de la residencia de unos familiares en su vehículo marca Ford Fiesta, color blanco y del año 2014, fue interceptada por un automóvil del que se bajaron dos individuos y le apuntan con armas de fuego exigiéndole las llaves, esta le indicó que estaba encendido y lo abordaron, huyendo del lugar.

En la huida se alega que los sospechosos le dispararon al teniente de la Policía Municipal de Río Grande, Luis E. Acevedo Rosario, que mientras daba una ronda preventiva se dio cuenta que ese era el carro que habían hurtado e intentó perseguirlos. El disparo le ocasionó daños al cristal frontal de la patrulla y el oficial resultó ileso.

Los ladrones perdieron el control del volante y chocaron con un poste en la entrada de las urbanizaciones Jardines y Villas de Río Grande, donde salieron corriendo siendo arrestados. Un cuarto sospechoso no logró ser capturado.

Además, se recuperó el otro vehículo en el que transitaban inicialmente descrito como una guagua Jeep Compass, color gris, que le pertenece a la abuela de uno de los detenidos.

En la escena se ocupó como evidencia una pistola Glock modelo 22 de calibre .40 y un cargador con capacidad de 30 municiones el cual estaba vacío.

Uno de los imputados fue identificado como Dybrian Cruz Marengo, de 21 años y vecino de Ceiba, a quien apodan Diablo, el cual posee antecedentes penales por violación a la Ley de Sustancias Controladas en el 2019, en el que no hubo convicción no hay convicción y tiene un caso abierto en el Tribunal de Ponce por daños agravados e incendio agravados. La última vista fue el 3 de abril.

Cruz Marengo fue identificado en una rueda de confrontación personal.

Este enfrenta cargos por violación a los artículos 6.05 (posesión y transportar arma sin licencia); 6.08 (posesión de arma sin licencia); 6.14-B (disparar y apuntar con arma) y 6.20 (disparar desde un vehículo) de la Ley de Armas.

Además, se le radicaron acusaciones por amenaza, robo, daños agravados, resistencia y obstrucción a las autoridades y poner en riesgo a la seguridad del orden público.

El acusado fue ingresado en prisión al no prestar la fianza de $75,000.00 en cada una de las denuncias, para un total de $675,000.00.

El adolescente, fue imputado de faltas por robo agravado, daños agravados a un vehículo oficial, resistencia u obstrucción a la autoridad pública, amenaza y violaciones a los artículos 6.05, 6.14 y 6.20 de la Ley de Armas.

El jovencito estaba en probatoria como menor.

El caso fue consultado con la fiscal Lenabel Alvarado y la Procuradora de Menores Lisa Alverio Flores.

En el caso del menor quedó ingresado en una institución juvenil y la vista adjudicativa de causa probable se pautó para el 21 de junio, mientras que la vista preliminar contra el adulto se verá el 26 de junio.