La  progenitora de la infanta Yeika Irizarry Vega,  quien murió anoche tras sufrir una fractura craneal y hemorragia, luego de que la lanzara contra el corral, enfrentará nuevamente la justicia el lunes, cuando será excarcelada para la radicarle cargos por el asesinato. 

El fiscal de distrito interino de Ponce, Ángel García, informó a través de la portavoz de prensa del Departamento de Justicia, Juliana Rodríguez, que van a excarcelar a la mujer para radicarle las nuevas acusaciones luego del fallecimiento de la niña, de un año y medio, en la Unidad de Intensivo del Hospital Pediátrico donde había sido recluida. 

El jueves, se radicaron cargos contra la madre de la bebé, Anaís Vega Sepúlveda, de 21 años, vecina del barrio El Tuque de Ponce, por los delitos de tentativa de asesinato y maltrato de menores. El juez Luis Vélez Vélez, del Tribunal de Primera Instancia de Ponce, determinó causa para su arresto señalándole una fianza $1, 250,800, la cual no prestó por lo que fue ingresada a la cárcel de mujeres en Vega Alta.

Vega Sepúlveda, confesó a las autoridades que el miércoles, mientras alimentaba a la niña se molestó con ella porque escupió la comida y la lanzó contra el corral, donde quedó inconsciente. A la misma vez, fue a la habitación de su otra hija de dos años porque estaba llorando y cuando regresó al ver que la niña ni lloraba llamó a su esposo Luis Irizarry Natal, quien la llevó hasta el Hospital San Lucas, donde fue referida al Centro Médico, debido a su condición crítica. 

A su llegada al Centro Médico de Río Piedras, en estado comatoso, la bebé fue atendida por neurocirujanos que la sometieron a una intervención quirúrgica y posteriormente se tramitó su traslado a la Unidad de Intensivo Pediátrico.

El caso fue investigado por el agente de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) de Ponce, Enrique Meléndez, junto a la fiscal Rubimar Miranda.