A horas de conocer la designación del boricua James Tuller Cintrón como superintendente de la Policía, los elogios y las críticas continúan resonando.

Uno de los que tronó contra el nombramiento fue el excandidato a gobernador por el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP), Juan Dalmau.

Según manifestó en declaraciones escritas, la designación del exjefe de la División de Transportación de la ciudad de Nueva York no es mas que “otra manifestación del complejo de inferioridad de quienes dirigen nuestro país, es un desaire e insulto a los muchos funcionarios capaces y comprometidos de la Policía de Puerto Rico que conocen mejor que cualquiera de afuera la idiosincrasia de este organismo y realidad del grave problema de criminalidad que arropa al país”.

Recordó que la designación de agentes federales al cargo no han demostrado que estos sean la solución a los problemas de criminalidad de la Isla. Como ejemplo, recordó el mandato José Figueroa Sancha y el del saliente Héctor Pesquera.

“Sólo espero que en esta ocasión -contrario al cuestionable proceso que se dio con el nombramiento de Héctor Pesquera- no se burle la obligación de la Asamblea Legislativa de pasar juicio y consentimiento de este nombramiento como lo mandata la ley", sentenció Dalmau.

Por su parte, el presidente de la Comisión de los Jurídico, Seguridad y Veteranos, Miguel Pereira, afirmó que analizará el nombramiento con una postura “neutral”.

En entrevista radial (NotiUno), el senador le restó importancia a que Tuller Cintrón lleve 40 años fuera de Puerto Rico. Sin embargo, aceptó que le sorprendió que el gobernador Alejandro García Padilla buscaran a un candidato fuera de Uniformada local.

 “No quiere decir que un policía de otro sitio no nos puede ayudar”, llegó a decir en una ocasión, al aceptar que el funcionario tendrá que “ponerse al día” con lo que ocurre en el país antes de entrar en funciones.

 En otros temas, el juez federal Gustavo Gelpí emitió unas declaraciones a este diario en la que aclara que su ingerencia en el caso que terminó con la designación del Asesor Técnico de Cumplimiento (TCA, por sus siglas en inglés), Juan Mattos, en nadie tiene que ver con la designación del superintendente de la Policía.

“Tal y como mencioné durante la vista de aprobación del TCA, y luego en un aparte con la prensa, el Superintendente de la Policía responde únicamente al gobernador de Puerto Rico. Reitero, el superintendente no responde al Tribunal Federal. Tampoco responderá al TCA. Este tribunal ni el designado TCA de ninguna forma participaron ni participarán en la selección ni aprobación del nuevo superintendente. Esto le corresponde única y exclusivamente al Gobierno”.

 Añadió que “de igual manera, el TCA de ninguna manera supervisará al superintendente. El rol del TCA será asesorar a los Gobiernos de Puerto Rico y Estados Unidos como cumplir con el acuerdo entre ambos gobiernos".