Regresan a la escena del crimen de comerciante en Cayey ocurrida hace más de 11 años
Se llevarán a cabo pruebas forenses para revelar patrones de sangre no visibles.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 2 años.
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Transucrridos casi 12 años del asesinato de un comerciante en su residencia localizada en la carretera PR-730, sector el Campito del barrio Buena Vista, en Cayey, personal de la División de Crímenes Mayores junto a investigadores del Instituto de Ciencias Forenses (ICF) regresaron hoy a la escena para corroborar información nueva que han surgido durante el desarrollo de la pesquisa.
El Negociado de la Policía de Puerto Rico, indicó que los peritos llevarán a cabo pruebas forenses con el reactivo conocido como “BlueStar” para revelar manchas o patrones de sangre que han sido lavadas, limpiadas o son invisibles a simple vista. Este no altera el ADN de la sangre revelada lo que facilita su análisis.
La teoría inicial de los investigadores era que propietario de la casa de empeño Cracker Jack, identificado como José Antonio Rodríguez Ramos de 78 años, fue asesinado el 27 de septiembre de 2011 a puñaladas en la cocina del hogar a eso de las 8:20 p.m. por dos enmascarados en medio de un robo domiciliario. No se ha revelado si ese sigue siendo el motivo del crimen.
Para la fecha de los hechos, se informó que Rodríguez Ramos ocultó a su nieto en el baño para protegerlo e hizo frente a los asaltantes que entraron libremente a su hogar ya que no se encontró nada forzado.
La directora de la división, sargento Karina Ojeda, encabeza la pesquisa.