Julio Herrera Velutini, el banquero acusado por cargos relacionados al caso de la exgobernadora Wanda Vázquez, se entregó al Negociado Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés).

Herrera Velutini tendrá una vista a la 1:30 p.m. de hoy por videoconferencia ante la jueza Giselle López-Soler, informó El Nuevo Día.

Herrera Velutini está acusado junto a la exgobernadora y el exagente federal Mark T. Rossini, de defraudar al gobierno, soborno con fondos federales y fraude electrónico. De ser hallados culpables, podrían enfrentar cada uno hasta 20 años de prisión.

Según la acusación, Herrera Velutini, dueño de Bancrédito Interantional Bank & Trust Corporation, y Rossini, exagente del FBI quien ofrecía servicios de asesoría a Herrera Velutini, presuntamente prometieron proveer apoyo financiero a la campaña de la exmandataria con el fin de que ella, con su influencia política, destituyera y reemplazara al comisionado de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), George Joyner, pues Bancrédito era objeto de una examinación de parte de la oficina. En cambio, buscaron reemplazarlo con Víctor Rodríguez Bonilla quien fue recomendado por Herrera Velutini.

Es por esto que Vázquez Garced supuestamente aceptó sobornos y, en febrero de 2020, “tomó acción para exigir la renuncia del comisionado de la OCIF” a cambio de $300,000.

Para montar la esquema, Herrera Velutini y Rossini se comunicaban “en secreto” y mediante intermediarios, identificados como Frances Díaz- presidenta de Bancrédito- y John Blakeman- asesor político de Vázquez Garced durante su campaña.

“Herrera, Rossini, Vázquez y sus coconsipradores se comunicaron en secreto entre sí directamente y a través de intermediarios a través de mensajes de texto, correo electrónico y aplicaciones de mensajería basadas en Internet, y durante reuniones internas, para discutir aspectos del acuerdo de pago de sobornos a Vázquez”, lee la acusación.

La acusación reveló que el 15 de diciembre de 2019 Herrera Velutini envió un mensaje de texto a Díaz que leía “¡Hablé con John (Blakeman) anoche! Debemos entrar a la Fortaleza y apoyar a la nueva gobernadora” y que debían usar “un rodillo de pavimentación sobre OCIF y construir una nueva estructura que regule y no persiga a los bancos y cambie los documentos de los documentos de fabricación”.

Cuatro días después, según la acusación, Herrera Velutini tuvo un intercambio de textos con Blakeman sobre cómo la International Consulting Firm- una firma de cabildeo internacional que opera en los Estados Unidos, el Reino Unido y Australia, entre otros lugares- ayudaría a su “amiga” a triunfar en las elecciones.

Se desprende de la investigación que los mensajes comprometedores continuaron y, en enero de 2020, Rossini le prometió a Herrera Velutini en un mensaje de texto que la OCIF “pagaría caro” por su examinación a Bancrédito.

En ese mismo mes, Herrrera y Vázquez asistieron a una boda. Sentados en la misma mesa, Herrera Velutini recibió un mensaje de Blakeman afirmando que Vázquez ganaría las elecciones “con la ayuda de todos ustedes”.

“¡Lo tiene (nuestra ayuda)! En este mes ya tiene ($)2MM...pero tiene que resolver OCIF”, lee el cúmulo de respuestas que envió Herrera Velutini a Blakeman.

Para la segunda semana de enero de 2020, Herrera Velutini, Díaz y Blakeman se reunieron con Vázquez Garced en La Fortaleza, cónclave que se llevó a cabo después de que Herrera Velutini le dijera vía texto a Díaz que preveía una solución para “despedir a la gente que ha secuestrado a la Ocif y poner un comisionado interino que forme una Junta Internacional de Reforma Bancaria”.

Tras esa reunión en La Fortaleza, Rossini especificó en mensajes al director de la International Consulting Firm, cuya identidad no fue revelada en la acusación, que la gobernadora aprobaba la participación de la International Consulting Firm y que Herrera lo financiaría.

“Algunas finanzas de la campaña pagarán por sus servicios. El grueso lo pagará Julio”, leía el mensaje.

Ya para principios de febrero, Blakeman le avisó a Díaz en un mensaje de texto que había llamado a La Fortaleza y, haciendo alusión a Vázquez Garced, reportó que “la instrucción de G fue dada” para retirar el nombramiento de Joyner.

Para el 28 de febrero, Joyner presentó su carta de renuncia y, en marzo de 2020, Rodríguez Bonilla fue nombrado por la exgobernadora como comisionado de la OCIF. La fiscalía federal, por su parte, no identificó a estas personas, sino que las clasificó como “Comisionado OCIF A” y “Comisionado OCIF B”.

“Herrera y otros ocultaron el propósito ilegal y corrupto de los sobornos pagados en beneficio de Vázquez al canalizar ciertos pagos por servicios de consultoría política a través de cuentas bancarias de Rossini y de terceros”, dicta la acusación federal.

Acto seguido, Herrera Velutini y Rossini buscaron establecer un director de campaña para la primaria del 2020.

Según la acusación, Herrera Velutini dijo que no quería “poner un mono de Puerto Rico” para que ocupara esa posición. A esto, Rossini coincidió, respondiendo que la International Consulting Firm conseguiría a alguien de Washington D.C., ya que necesitaban “a alguien de los nuestros” que ocupara el cargo.