Tanto los fiscales como la defensa en el caso contra el exalcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill, se expresaron confiados en que el Tribunal Supremo de Puerto Rico falle a su favor cuando atienda el reclamo ante su consideración para que se vean dos juicios por separado, como desea la defensa, o uno solo con todos los cargos por los presuntos actos contra las dos alegadas víctimas.

Lo que sí está claro es que la decisión del Supremo será final, pues ya la fiscalía ha agotado todos los recursos posibles para reclamar en torno a ese asunto.

Mientras tanto, el caso sigue en espera y se pautó una nueva vista de seguimiento para el próximo 1 de mayo.

Dos mujeres acusan al exalcalde, alegando haber sido víctimas de diversos actos de acoso y abuso sexual por parte O’Neill enfrenta cargos de violar la Ley 54 de violencia doméstica, en su modalidad de maltrato y agresión sexual, así que como de violar la Ley de Ética Gubernamental por aprovechar su posición como alcalde para obtener beneficios sexuales, entre otros. Además, se le imputan dos cargos menos graves de exposición deshonesta y acoso sexual. Los cargos podrían llevar condenas de 25 años de cárcel o más.

El abogado del exalcalde, Harry Padilla, pidió que los casos se vieran por separado, por considerar que se trata de acusaciones que no están relacionadas. Pero los fiscales especiales independientes Guillermo Garau y Leticia Pabón han sostenido que deben verse en un solo juicio.

La jueza María Trigo Ferraiuoli, del Tribunal de Bayamón, falló inicialmente en favor de la fiscalía. Pero el Tribunal de Apelaciones falló a favor de otro político del Partido Nuevo Progresista (PNP). Garau y Pabón recurrieron al Tribunal Supremo.

Los fiscales explicaron que están esperando la respuesta al segundo pedido de reconsideración, “que es la última que nos queda según el reglamento”.

“Lo que se decida, pues es lo que vamos a hacer. Si el tribunal decide que van a ser dos juicios, pues dos juicios se celebrarán. La prueba está ahí”, dijo Pabón.

“Pero yo fe que de que el Supremo va a expedir, va a entrar y va a resolver”, afirmó Garau, quien defiende que al hacer un solo juicio se ahorraría tiempo y recursos al tribunal.

Por su parte, Padilla recapituló que luego de fallo del Tribunal de Apelaciones, el fiscal acudió ante el Supremo que “emitió un no ha lugar a la petición de ‘certiorari’. Radicaron una primera moción de reconsideración. Le declararon no ha lugar. Y está pendiente la segunda moción de reconsideración, que es la última que permite el reglamento del Tribunal Supremo”.

“Tengo mucha fe de que vayamos a prevalecer al final del caso”, afirmó Padilla. “Tenemos que entrar a unos procesos. Pero la posición mía es que, conforme a las reglas de procedimiento criminal, cuando tú las conjugas con las reglas de evidencia, pues tiene derecho a un juicio por separado”.

Padilla insistió en que los casos no deben verse en conjunto, sino que “tienen que ser dos grupos”.

“Hay un caso de 3.1 de Violencia Doméstica, hay un caso de 3.5 (de Violencia Doméstica), hay un caso de Ética Gubernamental y hay dos delitos menos graves. Eso sería un grupo de casos. Por otro lado, habría otro caso, que es un caso de actos lascivos y un caso de Ética Gubernamental. Son dos grupos de casos, pero separados. Cada uno responde a eventos distintos”, detalló Padilla.