Las autoridades aún no han dado con la avioneta que se presume cayó la noche del viernes en algún punto entre las islas de Culebra y St. Thomas.

Según la información ofrecida por la Guardia Costera, la aeronave Cessna 172 salió de Aguadilla a eso de las 6:00 p.m. de ayer, viernes, rumbo a St. Thomas, para un vuelo de entrenamiento. Fue durante el regreso, a eso de las 10:00 de la noche, que perdió comunicación con la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés).

En la avioneta viajaban Oswald Fuentes Román, un joven piloto que hacía horas de vuelo, y Karl Richardson, quien contaba con más experiencia en la aviación.

La agencia, incluso, colocó un aviso en las redes sociales en la que pedía la colaboración de la ciudadanía para dar con su paradero.

Personal de las Fuerzas Unidas de Rápida Acción (FURA) de Fajardo, se unieron a la búsqueda de la avioneta.

“Estamos buscando a ver si vemos algún tipo de resto (de la avioneta) en el agua, pero como eso ocurrió anoche, lo que pudo haber caído, el agua lo pudo haber movido, pero seguimos buscando por si acaso tenemos la suerte y la persona todavía está viva”, sostuvo el sargento Ernesto Pabón, quien lidera el grupo de oficiales estatales que colaboran en el operativo, en declaraciones a Telenoticias.

Indicó que la búsqueda se concentra entre Culebra y St. Thomas. En el caso de FURA, su misión se concentra cerca de la isla Culebrita en dirección hacia el noreste, mientras la Guardia Costera recorre otras áreas de donde se cree pudo haber desaparecido la nave.

No se indicó, al momento, cuándo detendrán la búsqueda.

Por su parte, Oswald Fuentes, padre, dijo que la familia llegó al aeropuerto a las 6:30 de la mañana del sábado, tras reportar la situación a eso de las 11:00 p.m. del viernes y, hasta la tarde, era poca la información que había recibido por parte de las autoridades.

“Yo sé que las agencias han activado los protocolos, pero en este momento, estoy desde las 6:30 de la mañana aquí con desespero, verdad, como padre, ante la situación y acabo de solicitar una actualización de dónde estamos con la búsqueda, dónde están las teorías sobre la data que se ha recopilado, que es bastante data, para hacer análisis para por lo menos estipular cuál pudo haber sido la falla, si es que la hubo, y cuáles son los próximos pasos”, sostuvo entrevistado por la prensa en el lugar.

“Me encuentro como que en el limbo. Estamos a la espera a ver qué pasa mañana otra vez, cuando cada minuto que pasa aquí se desvanece mi esperanza”, agregó.

Por su parte, la madre del joven desaparecido, relató que seguía el vuelo de su hijo con la aplicación Flightradar, cuando desapareció de la pantalla.

“Veo que van hacia el norte de Culebra y, en cuestión de segundos, veo que comienzan a cambiar la ruta hacia el sur de Culebra. En esa dirección pierdo la conexión del radar y no lo veo más. En ese momento que el está perdiendo, le digo (escribo) que no corriera riesgos. En ese momento, tuve que salir de la aplicación, volví a entrar, no lo encuentro. Le envió un mensaje donde le dijo ‘dónde estás, por dónde vienes’. Esos últimos dos mensajes nunca le llegaron a su teléfono y desde ese momento no tengo comunicación con él”, contó Román a Telenoticias (Canal 2).