Testifican sobre conciertos de famosos artistas en residencial Barbosa de Bayamón
Prominentes figuras de la industria de entretenimiento continuaron desfilando esta mañana en el juicio del notorio Ángel Ayala Vázquez.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 14 años.
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Prominentes figuras de la industria de entretenimiento continuaron desfilando esta mañana en el juicio del notorio Ángel Ayala Vázquez, conocido como Angelo Millones, y su medio hermano Luis Xadiel Cruz Vázquez, para ofrecer detalles sobre su participación en los conciertos de Navidad que se realizaron en el Residencial José Celso Barbosa, en Bayamón, entre 2006-08.
Una de las figuras más conocidas, Ender Vega, presidente de la compañía Acisum, la cual produjo un concierto del merenguero Elvis Crespo en dicho complejo público en el 2008.
Vega, productor de televisión y quien ha trabajado con reconocidos artistas como Fiel a la Vega, Tego Calderón y Vico C, indicó que recibió un pago de $12,000 por el concierto de Crespo. Agregó que el dinero llegó en efectivo en una bolsa de papel a través de un sujeto conocido como Cano.
Hasta el momento se desconoce si dicho individuo figura entre los acusados de la banda del presunto capo de la droga.
La fiscalía federal presentó un recibo de $12,000 y un depósito de $11,000 en la cuenta de la compañía.
Vega dijo que los restantes mil dólares se lo pagaron a otra persona llamado Marcos por gestionar el concierto.
"Se le pagó 9,300 dólares a Elvis Crespo", señaló Vega en la silla de testigos cuando fue confrontado con un cheque que su compañía emitió al artista.
Otro testigo, Ángel Mejía Rodríguez, se identificó como el representante de Wisin y Yandel, dúo que también se presentó en el mismo residencial, en la fiesta de Navidad de diciembre de 2008.
Mejías Rodríguez dijo que también recibió un pago de $12,000 de la misma manera por este concierto y el dinero fue repartido entre varios integrantes del grupo.
"Le di el dinero al production manager para que lo repartiera entre la banda y los bailarines, pero Wisin y Yandel no cobraron nada", declaró el testigo.
Durante este testimonio se presentó un documento oficial del Servicio de Rentas Internas de Estados Unidos que desglosa el pago. No obstante, el testigo indicó que firmó el documento, pero que no lo llenó.
El primer testigo a ser llamado por la fiscalía al reanudarse el juicio en la mañana fue Juan Manual Comulada, representante de la empresa OALL SED, que proveyó el sistema de sonido para conciertos entre 2006-08 en el residencial.
La empresa facturó $1,500, $8,800 y $9,500, respectivamente, en actividad en cada año.
El testigo explicó que en el 2007 se facturó una cantidad mayor del 2006 por un sistema de iluminación para el concierto de Daddy Yankee.
Otro de los testigos en el caso, Elvin Irizarry, ofreció detalles sobre el dinero en efectivo que la organización de Angelo Millones recibía de cargamentos de drogas que enviaba a Estados Unidos.
El convicto, que está cooperando con la fiscalía federal, indicó que él se encargaba de transportar dinero en efectivo entre Nueva York y Puerto Rico. Además, trabajó para Víctor Meléndez, el presunto contacto del acusado en Nueva York que fue de los primeros en testificar en este caso.
Irizarry aseguró que Meléndez, otro convicto federal, que había ascendido dentro de los rangos del bajo mundo como uno de los distribuidores de drogas más importantes de mediados de esta década, tenía el club 2J´s en Isla Verde donde se realizaban reuniones entre líderes de la organización.
El testigo indicó que pudo haber lavado entre dos y cien millones de dólares por todos los cargamentos de dinero que transportó entre Nueva York y Puerto Rico.
Conexión colombiana
Un informante colombiano de la Administración Federal Anti Drogas testificó a eso del mediodía que comenzó a coordinar el envío de un cargamento de mil kilos de cocaína con dos presuntos socios de Angelo Millones mediante reuniones que se realizaron en la República Dominicana y en el Hotel Intercontinental de Isla Verde.
Los dos sujetos fueron identificados como José “Lanza” Hernández Torres y Nino Brown. El informante, que comenzó a cooperar con las autoridades luego de su arresto por cargos de narcotráfico, indicó que Hernández Torres le había asegurado que Angelo Millones era su socio y un narcotraficante que controlaba la venta de drogas en Bayamón.
Hernández estaba dispuesto a invertir $200,000 en el cargamento que se iba a enviar desde la República Dominicana a Puerto Rico.
La Fiscalía federal presentó un vídeo de un operativo encubierto en que el informante, Hernández Torres y Nino Brown, coordinan los detalles de la entrega del dinero y de una lancha que se iba a utilizar ante la eventualidad de que surgiera algún percance con la nave que iba a transportar la droga desde la República Dominicana.
La primera reunión entre el confidente y los narcotraficantes se dio en la República Dominicana, pero en esta ocasión no se pudo grabar.
“En la República Dominicana cerramos un trato. Íbamos a traer un cargamento de mil kilos y él (Hernández) iba a poner $200,000 en efectivo”, dijo el confidente.
El testigo explicó que para cargamentos de esta magnitud varias personas invierten dinero para así dividir las ganancias o las pérdidas ante la eventualidad de que sea confiscado o que se pierda por alguna otra razón.
Indicó que el precio del kilo de cocaína en Colombia fluctúa entre los $2,000 y $1,500, pero que en Puerto Rico, dependiendo de la demanda u otra consideraciones que rigen la industria del narcotráfico local, su costo podría ascender a $20,000.
Para este alijo, la banda de Angelo supuestamente podría haber recibido unos 33 kilos mediante una inversión de $200,000, ya que se aplicaba el costo de la droga en la República Dominicana, el cual se estima en $6,000 el kilo.
En el vídeo presentado por la Fiscalía, Lanza sostiene una conversación con el confidente sobre Angelo Millones.
“Tenemos un combo chevere. Yo si puedo decir que estoy con Millones. Trabajamos juntos. El está más en el caserío, él tiene un nombre grande, pero no le hacen nada porque no hace nada”, dijo Lanza en una parte del vídeo que se hizo en una habitación del hotel Intercontinental en Isla Verde, Carolina.
“Trabajamos todos juntos, todos en familia. En total somos unos 70. Nos llaman el combo de los 70. Cualquier mierda que pasa nos llega a los oídos. Lo de nosotros es trabajar y ganar. Estamos todos ahí, conformes, por eso nos quiere todo el mundo”, afirmó Lanza, quien durante un segmento de la grabación subrayó que Angelo Millones devengaba unos $300 mil mensuales por la venta de drogas en los denominados puntos que estaban bajo su dominio.