Juana Díaz. Confundida y agobiada por una noticia publicada en Internet, en la que se notificaba que un camión que portaba gasolina se había incendiado en Juana Díaz, fue que Sonia Rivera comenzó a llamar por celular durante la madrugada de ayer a su esposo, el chofer Héctor Martínez. Pero éste nunca contestó su teléfono.

Su angustia aumentó, pues los hechos habían ocurrido precisamente en la ruta que el hombre, de 40 años, recorría día tras día durante los últimos años como chofer del camión Frailer Lander que pertenecía a la Cooperativa de Camiones.

“Entonces llamamos a su hermano, quien también es transportista, y nos dijo”, relató la hermana de Rivera, quien también se llama Sonia, sobre el momento que supieron el fatídico desenlace del hombre que aparentemente perdió el control del vehículo cuando se quedó dormido.

“No sabemos qué realmente pasó... estamos esperando que los agentes investigadores hablen con nosotros”, agregó la mujer, mientras la viuda era consolada por otros familiares.

“Es horrible e impactante todo lo que ha sucedido, y mi hermana está bien afectada”, contó sobre el estado anímico de la viuda, quien no sabía cómo explicarles a sus hijos, dos varoncitos de siete y cuatro años, la tragedia en la que habían perdido a su papá.

Datos preliminares de la Policía indican que eran aproximadamente de las 2:10 de la madrugada cuando Martínez -quien iba con destino a Mayagüez- conducía un camión cargado con 10 mil galones de gasolina y, aparentemente, el sueño lo traicionó provocando que perdiera el control del vehículo.

El comandante de área de los Bomberos, César Caminero, explicó que la víctima pudo haberse quedado dormido durante el trayecto, impactando una valla y volcándose al llegar al kilómetro 86.2 de la autopista PR-52 en dirección hacia Juana Díaz. Fue entonces cuando se incendió.

“La teoría preliminar es que la fricción del tanque en la carretera ocasionó que se partiera y se incendiara”, dijo Caminero.

El lugar, que comprende más de 50 pies, tenía apariencia de haber sufrido una terrible explosión, pues los árboles y las áreas verdes estaban quemadas. Además, el olor a combustible impregnaba la zona. En un lado, el camión destrozado con un cuerpo calcinado en su interior y en el otro, un tanque hecho casi cenizas. La escena era tan dramática que dejó atónito a los presentes.

“Cuando salí a la marquesina eso parecía un infierno en llamas”, dijo Nelson Guzmán, vecino de la urbanización Los Algarrobos, la cual colinda con la autopista.

Elogios al conductor

René Camacho, compañero de trabajo de Martínez, llegó hasta el lugar y lamentó la tragedia y le achacó el accidente a las malas condiciones de la carretera. “Ese carril derecho está pésimo”, dijo.

Personal de la Junta de Calidad Ambiental llegó al lugar para la limpieza del área.