En su fiscalización en la operación del sistema eléctrico, la Unión de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER) radicó una demanda ante el Tribunal Federal para promover que el contrato de generación de energía que el gobierno firmó con la empresa Genera PR se declarara nulo, informó este viernes el presidente sindical, Josué Mitjá.

“Radicamos en la Corte de Distrito Federal este recurso legal para que se declare nulo el contrato con Genera PR para administrar las plantas generatrices a partir del 1 de julio. El contrato viola las leyes del país, pues según se desprende del mismo contrato Genera asumirá la operación y administración de todos los activos de la AEE”, expresó en comunicado de prensa.

Mitjá detalló que bajo el Contrato de Operación y Mantenimiento de Instalaciones de Generación Térmica de Puerto Rico entre la Autoridad de Energía Eléctrica de Puerto Rico como propietario, la Autoridad de Alianzas Público Privadas de Puerto Rico como Administrador y Genera PR como Operador (“OMA”), Genera asumirá el control total de las funciones de generación y los activos de la AEE, creando un monopolio privado contrario a lo que expresa las leyes 120-2018 y 17-2019 donde, precisamente, se establece que los activos de la AEE dedicados a la generación de energía eléctrica no podrán ser vendidos, enajenados o asignados a un solo contratista bajo un Contrato de Sociedad o Venta, o de otra manera, como parte de una transacción de la AEE.

“Cuando estas leyes se firmaron se hicieron, según sus propulsores, con la intención acabar el monopolio público que había en la AEE, sin embargo, el contrato con Genera no abre el mercado de la generación, sino que lo mantiene como un monopolio privado. Según la propia ley, el Sistema Eléctrico de Puerto Rico no será un monopolio vertical. Tampoco podrá establecerse un monopolio horizontal en materia de generación de energía. Ninguna empresa de servicio eléctrico, por sí, a través o en conjunto con cualquier subsidiaria o afiliada de la misma, podrá controlar el 50% o más de la capacidad de los activos de generación de energía. Nada de esto se cumple con el contrato firmado pues el contrato le otorga a Genera el control sobre el 67% de la generación de energía”, añadió.

Por su parte, el abogado Rolando Emmanuelli, representación legal de la UTIER, explicó que el OMA es, por definición, un Contrato de Operación y Mantenimiento que le permite a la AEE mantener sus derechos de propiedad sobre los activos de generación legados. Sin embargo, durante la vigencia de la OMA, Genera asumirá la operación y administración de todos los activos y será responsable del desmantelamiento de las centrales.

“Genera tendrá control total y exclusivo sobre todos los Activos Legados de Generación, que incluyen las centrales eléctricas de Aguirre; Cambalache; Costa Sur; Culebras; Mayagüez; Palo Seco; San Juan; Daguao; Yabucoa; Jobos; Vega Baja; y Vieques. Esto constituye la totalidad de las centrales térmicas y a gas públicas, lo que significa que toda la generación de la AEE pasará a Genera y esto es claramente un monopolio”, precisó.

Asimismo, el líder sindical reclamó, que al igual que con el contrato de LUMA, Genera no invierte en mejoras de capital; no proporciona servicios nuevos o innovadores y no comparte los riesgos de fracaso porque su tarifa fija está más o menos garantizada.

“Tenemos en Genera otro LUMA, una compañía a la que hay que pagarle una tarifa fija de 22.5 millones al año, pagarle las tarifas de incentivo y los costos de operación incluidas las tarifas de los subcontratistas, además de los costos de P3, todo esto sin que ellos inviertan un centavo”, puntualizó.