La jueza superior de Bayamón, Vivian Durieux programó para el 2018 varias vistas relacionadas a las solicitudes de nuevo juicio del ex corredor de seguros, Pablo Casellas Toro, convicto por el asesinato de su esposa, Carmen Paredes.

Una vista evidenciaria quedó señalada para los días del 3 al 12 de abril de 2018. El 6 de febrero próximo se celebrará una conferencia sobre el estado de los procedimientos para verificar que se haya citado al jurado que falló en contra de Casellas Toro en una decisión de 11 a 1. 

La jueza atendió el caso ayer en una sala en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan ya que el Tribunal de Bayamón sigue en reconstrucción por los daños sufridos a consecuencia del huracán María.

El lugar de las nuevas vistas, en febrero y abril, se determinará posteriormente, en espera de que hayan concluido las reparaciones en el Tribunal de Bayamón. 

Casellas Toro fue transportado en la mañana de ayer al Tribunal de San Juan, pero no fue llevado a la sala del Piso 10, donde la jueza Durieaux atendió a los abogados Harry Padilla y Juan Ramón Acevedo y a los fiscales Janet Parra, Phoebe Isales y Sergio Rubio.

Vestido con mameluco azul de preso, el convicto, quien perdió en días recientes a su padre, el exjuez federal Salvador Casellas, se veía un poco más delgado y ojeroso. 

Sus abogados alegan que el veredicto por mayoría que emitió el jurado en contra es contrario a la Constitución de Estados Unidos, que exige que un veredicto unánime.

También alegan que el jurado que vio el caso no actuó de forma imparcial y que el Ministerio Público no les notificó de “unos beneficios” que había obtenido uno de los testigos principales de cargo, de nombre Joselito Rivera Seda.

De igual modo, sostienen que ninguno de los testigos en el caso por la muerte de Paredes eran oculares, sino indirectos o circunstanciales.