El infante de siete meses de Aguada que fue referido a intensivo pediátrico en el Hospital San Jorge el pasado 17 de junio por alegado maltrato, se recupera satisfactoriamente.

Así lo confirmó a Primera Hora la directora regional del Departamento de Familia, Maricelis Rodríguez, quien aseguró que el infante ya está alerta y fue retirado del respirador artificial.

El menor que reflejaba serios hematomas, marcas en el rostro y otros signos de maltrato, está custodiado por el trabajador social Manuel Villanueva, mientras su madre, Franchelys Feliciano Vélez de 26 años y su pareja sentimental Patricio Valentín Valentín están imputados de maltrato agravado.

“Se está explorando recursos familiares que puedan hacerse cargo del infante cuando salga del hospital”, señaló Rodríguez.

A preguntas de este medio, la jefa regional de Familia se defendió de acusaciones sobre negligencia por parte de la agencia, al no intervenir a tiempo para evitar que el infante terminara gravemente herido, presuntamente por su padrastro.

Según registros del fiscal Héctor López -quien lleva el caso y además logró presentar cargos contra Valentín Valentín por tentativa de asesinato y otro cargo contra la madre por negligencia- la abuela del infante, Jeniffer Echevarría, llevó al menor al Centro de Diagnóstico y Tratamiento (CDT) de Aguada el 7 de junio y generó una querella por supuesto maltrato. Ese día, el infante fue referido al Hospital San Antonio en Mayagüez, donde quedó en manos de Familia, según el director de la sala de pediatría, el doctor Jaime Viqueira Mariani.

Rodríguez aseguró que un encargado de la Unidad de Investigaciones Especiales (UIE) del Departamento de la Familia se personó al hogar, en el apartamento 39 del edificio 4 del Residencial Aguada Gardens, para ver si existía en realidad un peligro inminente y proceder a remover al menor.

“Tengo entendido que cuando fueron, el técnico Pablo Quintana observó al menor, y presentaba una marca en el lado derecho de la frente, de la cual los doctores expresaron que la misma pudo haber sido generada por el mismo menor al estar mucho tiempo en contacto con el plástico del mattress de la cuna”, dijo Rodríguez, haciendo referencia al informe generado por el técnico de Familia, quien le aseguró que no observó golpes ni otras marcas en el menor.

“Al no observarse nada, no hay un peligro inminente para remover al menor”, sostuvo la funcionaria, que salió en defensa del técnico de la UIE porque supuestamente “los doctores le dijeron a la familia paterna que (la marca en la cara) no podía ser certificada como producto del maltrato”.

Sin embargo, el director de pediatría del Hospital San Antonio reaccionó a esa versión en días pasados, asegurando que el pediatra que atendió el caso, siguió el protocolo de maltrato.

“Dado que el niño estaba bajo la custodia de la abuela y el niño estaba estable físicamente, el Departamento de la Familia procedió a autorizar el alta del niño bajo la custodia de la abuela y que ellos darían seguimiento al caso”, dijo Viqueira Mariani.

El caso fue asignado al trabajador social Manuel Villanueva el 19 de junio, luego de que el pasado 16 de junio, la madre del infante lo llevara al hospital en estado de gravedad y ofreciendo diferentes versiones a la policía sobre lo que le ocurrió.