Líderes del Comité Amplio para la Búsqueda de la Equidad (CABE) junto a feministas y ambientalistas se congregaron en el lado norte del Capitolio exigiéndole a los legisladores vistas públicas y un proceso transparente en la discusión del controvertible proyecto del Código Civil.

La medida está bajo la consideración del Senado de Puerto Rico, quien precisamente ayer, el presidente del cuerpo Thomas Rivera Schatz aseguró que cuenta con los votos para su aprobación pero que su discusión se quedaría para la próxima sesión en enero del 2020.  

“Dejen de discriminar por mi identidad sexual”, “A la Iglesia y al Estado los queremos separados”, “Tata, batata, tu homofobia mata” y “Rivera Schatz , macharrán, no te metas con las trans” fueron  algunas de las consignas que se escucharon entre los manifestantes.

Según  el activista Pedro Julio Serrano, portavoz de la CABE, no bajarán la guardia ante ese proceso que se busca de atender el código civil en enero  porque no han anunciado si van se concretarán vistas públicas.

“Nos sabemos cuál va a ser el mecanismo de revisión de este código y ciertamente, al día de hoy todavía no sabemos cuáles con las enmiendas que el Senado pretende ponerle al proyecto del Código Civil. Queremos que sea un proceso abierto y transparente que no sea un proceso cibernético como dijo inicialmente Rivera Schatz, sino que sea un proceso inclusivo”, dijo Serrano, quien comparó el código con el controvertible chat de Telegram que mantuvo el exgobernador Ricardo Rosselló con funcionarios de su gabinete y equipo de Comunicaciones y que le costó la renuncia.

El proyecto del Código Civil ha sido fuertemente criticado por, entre otras cosas prohibir  la compraventa de un vientre en casos de subrogación y por no tener un lenguaje inclusivo. 

“El llamado es que escuchen a las voces de expertos constitucionalistas de activistas de derechos humanos, de grupos que defienden los derechos en Puerto Rico y que se recojan esas enmiendas para que podamos tener un código del siglo 21 y si no es así que no se apruebe ningún código hasta que no haya una voluntad de crear un código que proteja a todos los puertorriqueños porque este es el documento que rige la relaciones desde antes de nacer hasta después de morir y nosotros tenemos que tener un código que represente las aspiraciones del pueblo puertorriqueño,  que es que se pueda proteger del discrimen y podamos tener las protecciones adecuadas en ese código”, sostuvo Serrano.

A juicio del también activista de Puerto Rico para Todos, se debe permitir la subrogación, se debe permitir que las personas trans puedan cambiar el certificado de nacimiento, cobijado por el Tribunal Federal y que el matrimonio se pueda realizar entre dos personas, irrespectivamente de su orientación sexual e identidad de género. De igual manera entiende que en los derechos esenciales no se puede excluir la raza, el género, la orientación sexual y la identidad de género, que quedó excluido en el proyecto que se aprobó  en la Cámara. 

“Tenemos que trabajar para que la adopción no sea un privilegio para parejas casadas sino que sea abierto para todas las personas que están hábiles para adoptar. Ese código prohibe la eutanacia, nosotros tenemos que tener una discusión más amplia sobre eso aquí en Puerto Rico, reduce las causales de divorcio a dos y eso pues limita”, indicó.

Serrano manifestó, además, que el proyecto privilegia a la Iglesia y crea una personalidad jurídica al no nacido lo que entiende puede abrir la puerta para limitar el derecho al aborto.

“Le da una personalidad jurídica a las iglesias lo que abre la puerta a legalizar el discrimen a través de  un proyecto de libertad religiosa y también a través  de las terapias de conversión  para discriminar en contra de la comunidad LGBTTIQ  y del mismo modo permitir  que las Iglesias obvien procesos legales y reglamentos que hay en Puerto Rico para prohibir  el discrimen y para atender cosas que ellos digan que atentan en contra de sus creencias y que el estado no puede juzgar esas creencias ni puede ponerse a decir la legitimidad de esas creeencias. Yo creo que eso es muy peligroso, abre una puerta muy amplia donde se pueden hacer muchas cosas muy peligrosas para derechos en Puerto Rico”, sostuvo.

Al momento no se han dado a conocer las enmiendas al proyecto trabajado desde la Comisión de lo Jurídico de la Cámara de Representantes, presidida por la representante María Milagros Charbonier.

Precisamente, el obispo Felipe Lozada, presidente del Concilio de Iglesias, se unió a la manifestación para pedirle a Rivera Schatz que hagan públicos los cambios que se están trabajando y que no solo se los haga llegar a la gobernadora Wanda Vázquez y a Ricky Martin. 

“Nosotros los que queremos es ver qué cambios si alguno, le hicieron a distintas partes que estamos criticando en términos de los derechos humanos, la cuestión de esta apertura tan amplia hacia la Iglesia en términos de la participación y que puedan tener negocios prácticamente. Nosotros somos del sector religioso pero también somos más comedidos en términos de utilizamiento de eso. Tanto secreto me preocupa”, puntualizó.