En plazas y calles, la estampa es recurrente: decenas de hombres y mujeres duermen en cartones, regatean una peseta y se convierten en esclavos de sustancias letales que los hacen funcionar como zombis.

La Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca) anunció en días recientes que llevará a las universidades testimonios de personas que han logrado superar la adicción a drogas y el alcohol a través de programas de tratamiento y rehabilitación.

Sin embargo, en la placita de la Parada 15, en Santurce, la realidad es otra. Allí unos luchan solos contra el vicio; otros logran salir, pero recaen y algunos logran dejarlo, pero no tienen alternativas para encaminar sus vidas.

María Díaz, quien es una especie de madrina en la placita, nunca ha estado en un programa de tratamiento. Rompió vicio sola y asegura que lleva 14 años libre de drogas.

Aunque logró superar la adicción a heroína y cocaína, la mujer lleva ocho años deambulando. Dice que los programas de tratamiento funcionan, “pero hacen falta otras cosas”.

“Necesitamos mucha ayuda psicológica que no la dan, lo hacen cuando a ellos le conviene. Necesitamos vivienda. A quien tienen que dársela no se la dan y, si uno la tiene, se la quieren quitar”, sostuvo la mujer, que tiene 47 años, pero dice que ha vivido 80.

“Yo siempre he dicho que el programa es este (la calle), si este no está programado, no hay programa que quite a nadie. Llevo 14 años, gracias a Dios, sin tocar la droga”, dice.

¿Cómo lo lograste?

Yo rompí en frío. Como entré, así rompí. Me tranqué un día en mi casa, boté las llaves, me quedé tres días sola... Como entré, así quise salir para recordarme el día que me dé con volver a hacerlo.

¿Qué haces para mantenerte libre de drogas?

Trato de dormir y comer mucho, ese el vicio mío ahora. A veces le doy a la marihuana, al pasto, para aguantarme la ansiedad. No te lo niego.

¿Hay tentación aquí?

Seguro que sí, hay un montón porque son muchos los que están en lo mismo.

Pablo Rosario Montalvo también deambula en la placita de la 15. Es usuario de heroína, crack, marihuana y alcohol. Lleva más de 30 años en la adicción. Ha estado en tratamientos públicos y privados, incluyendo metadona.

“Estuve quitao 15 años, pero recaí. Ahora estoy en la calle deambulando y en el vicio de nuevo”, confiesa.

¿Qué te hizo recaer?

A veces los problemas... Uno tiene problemas, ¿entiendes? y recae..., especialmente el problema mío... Estuve con una mujer y nos dejamos. Ahí fue que recaí porque no podíamos estar juntos como nosotros queríamos porque ella era casada. Nos amábamos y estuvimos bien, pero el problema fue ese. No he vuelto a saber de ella porque me vine pa' acá (para Santurce).

José Galdón Gómez, “ Canito”, también logró dejar el vicio, pero no tiene techo. “Se nos olvida en la mayoría de las facetas”, dijo mientras repartía comida en el lugar.

Su tío, Charlie Galdón Aquino, duerme en un solar abandonado con otra decena de deambulantes. “Mi problema es la bebida”, dijo Galdón, de 70 años, natural de Carolina.