Ambiente de incertidumbre en Vieques
Los viequenses apenas comenzaban a hacer los trabajos de recuperación ante el paso por la zona del huracán Irma y ahora se avecina lo que para algunos de ellos podría ser una catástrofe.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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“Mucha ansiedad, mucha depresión, mucha gente buscando medicina a última hora”.
Con estas palabras tan intensas, pero que reflejan a la perfección la vulnerabilidad humana, el director de la Oficina para el Manejo de Emergencias de Vieques, Héctor Olivieri, describió el panorama que se vive para la isla municipio a solo horas de que el huracán María pase sobre o cerca la Isla Nena.
“Nosotros nos preparamos para lo peor y esperamos que no sea tan malo”, señaló el funcionario ante la cercanía de María que se mantiene en un huracán Categoría 5.
El ambiente es uno de incertidumbre. Los viequenses apenas comenzaban a hacer los trabajos de recuperación ante el paso por la zona del huracán Irma y ahora se avecina lo que para algunos de ellos podría ser una catástrofe. Para complicar aún más su realidad, los abastos de gasolina prácticamente no existen y la comunicación con la isla grande debe cortarse en las próximas horas.
“Si se quedan sin gasolina, no nos pueden ayudar y ese es un problema que tenemos hoy, que vendieron toda la gasolina y todo el diésel, nosotros vamos a correr con lo que tenemos”, expresó Olivieri.
“Cómo se va a mantener esta oficina en pie, si nosotros no tenemos diésel para las ambulancias cómo podemos socorrer. Si la policía no tiene gasolina cómo nos va a dar la protección”, agregó el funcionario.
Dijo que, actualmente, el Ayuntamiento tiene un acuerdo con una de las tres gasolineras de la isla municipio para que reserven unos abastos para sus vehículos oficiales, así como los de la Policía. Sin embargo, tal y como ocurrió en Irma, el producto se agotó. El servicio de ferrie a Vieques y Culebra está detenido desde el lunes al mediodía, por lo que no existe probabilidad de que les llegue más petróleo.
Otra de las mayores preocupaciones es la comunicación de telefonía, la cual se cayó en su totalidad durante Irma. Esto, no solo afecta el despliegue de equipo humano durante la emergencia, sino que, además, retrasa la ayuda que se pueda necesitar desde Puerto Rico. “Cuando se van las comunicaciones quedamos totalmente aislados y es bien difícil comandar, es muy difícil tu dirigir operaciones de respuesta en una tormenta si no tienes comunicaciones”, planteó.
“En la zona 12, que somos los municipios del este, si Ceiba tiene un problema, Fajardo puede ayudarlo y lo mismo con Luquillo o Ceiba…nosotros estamos fritos, aquí no viene nadie”, apuntó.
Cerca de las 11:00 a.m., el Municipio ya no tenía servicio de energía eléctrica. El mismo, explicó Olivieri, se corta desde la isla grande por motivos de seguridad.
Al momento, la Isla Municipio tiene habilitados dos refugios, el de la escuela María M. Simmons, donde se han colocado 100 catres y otro en la comunidad Las Marías, donde ya hay resguardadas 54 personas, siete de estas permanecían allí desde el paso de Irma.
“La casita de está que de uno darle una patá cae al piso, está viejita y lo único que tiene en cemento es el baño”, indicó Violeta Romero, oriunda de Río Grande pero con residencia en Vieques hace 16 años.
“Estamos un poco asustados por el huracán porque no se sabe a qué personas puede hacerles daños y habemos muchas personas enfermas, envejecientes”, agregó la mujer.
Ismael García llegó al refugio “Dale la Mano a Puerto Rico”, en el barrio Las Marías, junto a su esposa y nieto. Su casa, como la de tantos otros viequenses, también es en madera. “Mi casa no está asegurada y por órdenes del Gobierno tenemos que refugiarnos hasta tanto paso el huracán”, dijo el hombre quien padece de apnea del sueño.
Recordó que durante el paso del huracán Hugo trabajaba en la Autoridad de los Puerto Ricos y fueron muchas las situaciones de emergencia que tuvo que atender. “Con este sistema va a pasar lo mismo de Hugo, no es fácil lo que viene. Le recomiendo a las personas que hagan caso y que no se limiten en moverse”, señaló al reconocer que no le fue fácil irse de su hogar, pero su prioridad es su vida y la de los suyos.