En picada la ambulancia aérea.

Las principales empresas que operan helicópteros para el traslado de pacientes en estado crítico a hospitales enfrentan dificultades económicas que amenazan con menoscabar aún más el servicio médico en Puerto Rico.

La disponibilidad de traslados rápidos y efectivos de un paciente en condición crítica también ha sido puesta en jaque por la escasez de ambulancias terrestres en zonas remotas. Las unidades de emergencia, que viajan por las congestionadas carreteras del país, en ocasiones tienen que realizar viajes de dos a tres horas para trasladar a un paciente en estado crítico al Centro Médico de Río Piedras, donde se atienden la mayoría de los casos médicos más complejos.

Dos empresas, Aviane Air Ambulance y Life Flight, intentan cobrar deudas astronómicas que arrastran algunas aseguradoras por traslados que requirieron pasar por un controvertible protocolo médico para ser aprobados por el Cuerpo de Emergencias Médicas.

La primera empresa está a la espera de reanudar el servicio en los próximos meses tras un accidente aéreo, mientras que la segunda contempla cerrar sus operaciones ante la falta de pago por parte de algunas aseguradoras.

Mientras tanto, Aeromed, la primera compañía de ambulancias aéreas en establecerse en la Isla en 1994, se acogió este año a la protección del Capítulo 11 de la Ley de Quiebras federal por “diferencias” con un proveedor, según se desprende de una comunicación oficial de la compañía.

Aunque el helicóptero de Aeromed continúa operando, su presidente, Ángel Roberto Rojas, denunció que el Gobierno ha desatendido la industria ante la carencia de controles para su funcionamiento adecuado. “No hay controles, ni seriedad ni formalidad”, afirmó.

Guerra aérea

La crisis económica de la industria de ambulancias aéreas surge tras una guerra sin cuartel entre algunas de las empresas para acaparar los traslados de emergencia. Se alega, además, que la reñida y, en ocasiones, desleal contienda motivó una medida del senador penepé Héctor Martínez para desbancar a Aeromed.

Según se desprende de la declaración jurada que la senadora popular Sila Mari González hizo a raíz del escándalo que vinculó a Martínez con el presunto narcotraficante asesinado José L. “Coquito” López, el senador es “ muy amigo” del dueño de Aviane, aunque éste lo descartó en una entrevista separada con PRIMERA HORA. González incluyó en su declaración jurada información de que Martínez habría usado un helicóptero de la compañía durante su campaña del 2004.

Aunque estudios apuntan a que los helicópteros son necesarios debido a la alta saturación vehicular, las compañías se quejan de prácticas desleales por despachadores y paramédicos del Gobierno que favorecen a competidores para los cuales trabajan a tiempo parcial.

El director ejecutivo interino de Emergencias Médicas, Gil Rodríguez, consignó que este tipo de favoritismo se extiende a la industria de ambulancias terrestres y subrayó que su agencia realiza varias investigaciones administrativas sobre el particular.

Para evitar los favoritismos en el proceso de despacho, el Gobierno estableció un protocolo que también ha sido objeto de críticas por las compañías que manejan el servicio. “Desconozco el llamado protocolo de Emergencias Médicas. Nunca se hicieron reuniones. Por despachadores que trabajan en otras compañías despachadoras, decidí llevar mi propio récord de los traslados”, comentó Rojas.

Actualmente, la Comisión de Servicio Público (CSP) regula la industria, aunque a las compañías se les requieren distintas certificaciones para el traslado de pacientes. Pero, es el sentir de algunos empresarios que la CSP no ha cumplido con su deber ministerial de fiscalizar el servicio de una manera adecuada.

El presidente de la CSP, Roberto “Junior” Maldonado, aseguró que bajo su mandato se liberó el mercado de ambulancias aéreas en beneficio de los pacientes, ya que sólo había una empresa operando en la Isla. “Una sola compañía no era suficiente para atender las necesidades de todo Puerto Rico”, consignó.

La CSP comenzó a abrir el mercado de ambulancias con un permiso provisional emitido a Aviane en 2004.

A pesar de la demanda por traslados aéreos, las empresas de ambulancias continúan perdiendo dinero ante la falta de pago por planes privados y médicos. La Reforma de Salud destina menos del uno por ciento de su presupuesto a cubrir los traslados aéreos, pero la titular de la Administración de Seguros de Salud (ASES), Minerva Rivera, no contestó varias peticiones para ser entrevistada.

Por su parte, la portavoz de la aseguradora Triple S, Vivian López, descartó que su empresa estuviese atrasando los pagos a las empresas que manejan el servicio de ambulancia aérea.

“Estamos pagando a tiempo, pero nos tienen que traer las reclamaciones”, apuntó López.