PONCE Mientras la vida útil de la mayoría de los vertederos se extingue y se vislumbra un problema con la disposición de los desperdicios sólidos, el alcalde de Ponce, Francisco Zayas Seijo, reveló que ese municipio recibió un permiso preliminar para ampliar la instalación sanitaria para uso por los próximos 30 años.

Zayas Seijo especificó que la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental Preliminar (DIA-P) permitirá la ampliación del vertedero “hacia el frente, donde está la charca de recolección de agua”.

“La Junta de Calidad Ambiental nos aprobó el permiso preliminar de la expansión del vertedero, lo que casi garantiza que tendremos vertedero por 30 años más. Estamos hablando de unas 30 a 40 cuerdas de terreno de expansión”, sostuvo.

El ejecutivo municipal ponceño dijo en entrevista con Prensa Asociada que el costo todavía no puede ser precisado hasta que la DIA-P se convierta en final (DIA-F).

De igual manera, especificó que el proceso ambiental fue realizado por la empresa Browning Feries Industries (BFI), que desde la década de 1980 opera el relleno sanitario de Ponce.

Zayas Seijo indicó que el fenecido alcalde Rafael Cordero Santiago había firmado un acuerdo con BFI para la expansión del vertedero hace cuatro años.

Agregó que mediante este acuerdo la empresa estadounidense tiene que costear la expansión del relleno sanitario, al igual que la mitigación cuando sea cerrado dentro de 30 años.