Baja de la grúa una manifestante en Paseo Caribe

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 18 años.
PUBLICIDAD
Tras permanecer más de cuatro días en una de las grúas del proyecto Paseo Caribe, una de las manifestantes bajó la tarde de hoy, y dijo que continuaría su protesta desde el campamento establecido a las afueras del proyecto privado.
La mujer, quien sólo se identificó por el nombre de "mariposa", no precisó las razones para bajar de la grúa, pero aseguró que no se debió a ningún quebranto de salud.
"El resto de los compañeros que se quedaron arriba, la decisión es esperar qué es lo que va a dar como resultado la corte para entonces tomar la decisión de bajar. Esperamos que todo se resuelva con sensatez, es lo que estamos esperando", manifestó a la prensa tras bajar de la grúa.
"Las condiciones no eran las mejores realmente, pero hay cosas que pasan a un segundo plano. Hay momentos en que hay cosas, como las condiciones, como el agua, como la comida, que pasan a un segundo plano. Lo volvería a hacer si fuese necesario", agregó.
Aclaró que, a pesar de las animosidades con los trabajadores de la constructora, los obreros nunca los atacaron, e incluso dijo que algunos de ellos les "hicieron llegar" agua y alimentos.
La mujer fue la segunda manifestante en bajar de las grúas. El miércoles, bajó el joven Michael Robert Snyder, de 21 años y natural de Estados Unidos. El joven fue arrestado por la Policía, pero no se radicaron cargos en su contra.
Todavía quedaban otros dos manifestantes en otras grúas.
El viernes por la tarde, juez de San Juan Carlos Dávila Vélez desestimó un recurso de mandamus radicado por la constructora F & R Construction para obligar a la Policía a bajar a los manifestantes que permanecen desde el lunes en las tres grúas de construcción del proyecto Paseo Caribe.
Aunque no resolvió un segundo recurso de mandamus presentado por organizaciones humanitarias, sí ordenó que se permita llevar alimentos a los activistas ambientales que protestan por lo que entienden es una construcción ilegal.
"No podemos utilizar el agua y el alimento como un elemento negociador", dijo el juez Dávila Vélez sobre la segunda petición de mandamus, y programó una vista para el lunes a las 3:00 de la tarde para que se le informe al tribunal sobre el estado de la situación.
El magistrado ordenó que cada 24 horas, comenzando a las 6:00 de la tarde del viernes, se permita darles comida a los manifestantes.