Bosque Toro Negro ideal para centro ecoturístico

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Centro ecoturístico en el bosque estatal Toro Negro.
A la luz de un estudio legislativo, el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales y la Compañía de Turismo deberán preparar conjuntamente un plan de acción que incluya actividades concretas que hagan viable la conversión del bosque estatal Toro Negro en un centro ecoturístico.
Dicho bosque, ubicado en la región central de Puerto Rico, entre los municipios de Orocovis, Jayuya, Ponce, Juana Díaz y Ciales, cuenta con el Cerro Punta, que es el pico más alto del país. Además, por él discurren los ríos Indalecia, Guayo, Inabón, Blanco, Anón, Prieto, Saliente, Toro Negro y Matrullas.
El senador penepé por el distrito de Guayama, Carlos Javier Torres, radicó la Resolución Conjunta del Senado 91 para que Recursos Naturales y Turismo preparen un plan de acción para convertir el bosque en un centro ecoturístico , encomienda que surgió a raíz del estudio que realizó la Comisión senatorial de la Montaña, por mandato de la Resolución del Senado 54, radicada el 14 de enero de 2009, y que rindió un informe con tales recomendaciones el 24 de marzo.
El recomendado Plan de Acción deberá formular cuál es la visión que se tiene para el bosque e identificar las actividades a seguir a base de ella; evaluar sus instalaciones existentes y especificar la infraestructura ecoturística necesaria; programar la construcción o mejoras de las instalaciones, tomando en cuenta la capacidad de carga permisible establecida o el límite de cambio permisible, así como crear estrategias para incorporar a las comunidades adyacentes en la planificación y desarrollo del centro ecoturístico.
También, deberá definir la participación del sector privado y de los municipios que comprenden el bosque; recomendar un presupuesto adecuado para financiar el proyecto de desarrollo ecoturístico, al igual que estrategias para su promoción y mercadeo.
“Ciertamente, el bosque Toro Negro tiene un alto valor turístico”, dijo el senador Torres en la exposición de motivos de su medida.
Además de lagos y su abundante flora y fauna, precisó, “cuenta con 18 kilómetros de veredas y caminos, hermosas vistas escénicas, una torre de observación desde donde se pueden apreciar las zonas norte y sur de Puerto Rico y área de acampar”.