Los módulos temporeros que el Departamento de Educación propuso construir en Guayanilla para que estudiantes acudan a clases presenciales se han convertido en una realidad cada vez más remota.

A un año y nueve meses desde que el sismo de magnitud 6.4 estremeció la región sur de Puerto Rico, aún no se ha subastado el proyecto para comenzar la construcción.

Así lo expresó esta tarde el alcalde de ese municipio, Raúl Rivera quien expresó a Primera Hora que ya no quiere esperar más.

Tras una reunión que sostuvo hoy, jueves, con el secretario de Educación, Eliezer Ramos Parés y la secretaria de la gobernación, Noelia García, entre otros funcionarios, se reveló que el costo de andamiaje para esta construcción aumentó un 88%. Rivera detalló que, de los $11.5 millones asignados por Educación para construir estos edificios temporeros, la cotización aumentó a $19 millones. Es por esto que se paralizó el proceso de subasta.

“No puedo seguir esperando por esa asignación o que resuelva la burocracia del Departamento”, puntualizó al recalcar que busca que la modalidad de clases “interlocking” tenga fin lo más pronto posible.

Es por esto que Rivera sugirió reparar los edificios Luis Muñoz Rivera y Rafael Lapena de la escuela Arístides Cales Quirós para ubicar a estudiantes de la escuela Hipólito García. Pronosticó que se requerirán $250,000 para las obras que demorarían menos de dos meses.

“Lo que les sugerimos fue que nos dejaran arreglar dos edificios que están en la escuela Arístides Cales para ubicar la escuela de Hipólito García. Allí hay 16 salones y la escuela necesita 15 salones para dar clases”, explicó Rivera al asegurar que los jefes de agencia con los que se reunió vieron su propuesta con buenos ojos.

Asimismo enfatizó que por los únicos módulos que Rivera estaría dispuesto esperar serán los de la escuela Herminio Arzola.

“Le sugerimos que se construyeran los módulos de Herminio Arzola para después de enero tener todas sin interlocking y presencial”, manifestó el alcalde quien fue maestro y director escolar previo a asumir la poltrona municipal en el 2020.

“Todo es una preocupación. Ante las cosas de papá Dios, ante los sismos, (todo) es impredecible, pero tomamos las medidas para que los niños cuando lleguen (a la escuela estén seguros)”, dijo el alcalde guayanillense.

En el caso de Guánica, el único municipio de la zona cero que completó el proceso de subasta para construir los módulos, resta más del 50% para completar la construcción, esto por la presunta falta de mano de obra y alza en los costos de equipo de construcción, según indicó el alcalde de ese pueblo, Ismael “Titi” Rodríguez.