José Hernández Trabal, un bayamonés de 65 años y que dice haberse unido a las protestas de los millennials, no durmió en la madrugada, tras conocer que el gobernador Ricardo Rosselló Nevares había renunciado.

Se trasnochó preparando una pancarta que leía: “Hoy celebro orgulloso jueves, 25 de julio 2019, Día del Grito Boricua”.

Su arte, que incluyó una bandera de Puerto Rico, era utilizado por los manifestantes que poco a poco se congregaban esta tarde frente a los portones principales de La Fortaleza para tirarse fotos ante una sola línea de agentes de la Policía que los dividía de la casa del gobernador.

Una de las que hizo fila para la foto fue Susana Soto, quien llegó a Puerto Rico la 1:00 a.m. de hoy desde Miami, lugar a donde se mudó a los seis días del devastador paso del huracán María.

La carolinense dijo que hizo la primera parada oficial en La Fortaleza, pues su hija le pidió ser parte de la historia.

“Aquí estamos celebrando esta primera parte, porque esto no termina. Espero que Puerto Rico siga igual y que demostremos al mundo, como lo estamos haciendo ahora, que no hay que derramar sangre para uno poder exigir sus derechos y el respeto que merecemos como puertorriqueños”, sostuvo Soto.

Pero más allá del orgullo que dice sentir por la batalla dada, esta movilización que se realizó para sacar a Rosselló Nevares de la gobernación le ha dado una nueva esperanza a Soto y a su familia. Ahora han comenzado a analizar si se regresan a vivir a Puerto Rico.

“Jamás pensé que esto pudiera pasar, pero esto me trajo otra vez a mi Isla. Ahora mismo, estoy decidiendo si regreso, si me quedo, aunque esté mi casa como esté todavía (tras el paso de María). Estoy pensándolo. Tengo unos cuantos días para pensarlo y si esto sigue así, me quedo”, dijo emocionada la mujer, quien también se describió como estadista.

Susana Soto (Frances Rosario)
Susana Soto (Frances Rosario)

“Para el que no piensen que los estadistas no estamos orgullosos de esto, sí lo estamos, porque también fuimos pisoteados. También nos insultaron en ese chat y todo el mundo sabe lo que él dijo. Como estadista, este es momento que cambie el rumbo de todos los partidos. Ya no van a ser azules y rojos. Va a ser todo aquel que quiera defender esta patria, sin corrupción y respetando el derecho del puertorriqueño”, añadió Soto.

Madeline Sepúlveda, residente de Camuy, también se tomó la foto con el letrero de Hernández Trabal.

“Esto es un día histórico y todo puertorriqueño con mucho orgullo tiene que estar aquí presente, porque logramos algo que era casi imposible, que era sacar al primer gobernador de Puerto Rico, que renunciara por su propia voluntad. Fue difícil, pero se logró”, dijo la mujer tras bajarse de una de las vallas de seguridad en las que se tomó su fotografía.

La mujer comentó que, de ahora en adelante, los puertorriqueños no aceptarán a ningún corrupto en el gobierno.

“Hoy es un Día de Grito Boricua, un día feliz, de optimismo y estamos lleno de orgullo”, afirmó Sepúlveda.

Mientras los manifestantes usaban su pancarta, Hernández Trabal gritaba para que las personas hicieran alguna bulla entre foto y foto.

“Hay que salir a la calle. Ya esto no es cuestión de política. Esto es cuestión de pueblo. La dignidad del pueblo ha sido ya ofendida y abusada, y anoche me amanecí haciendo el letrero ese para traerlo para que el pueblo de Puerto Rico celebre el Día del Grito Boricua. El 25 de julio lo vamos a recordar como el Día del Grito Boricua, porque ese día en el 1952 fue la primera vez que Estados Unidos reconoció nuestra bandera”, explicó sobre su legado en esta lucha.

Añadió que “demostramos por primera vez al mundo entero que dimos una cátedra de cómo el pueblo unido, peleando y luchando por la dignidad del pueblo lo puede hacer mejor que muchos politiqueros que tenemos en el Capitolio y demostramos al mundo entero que pacíficamente sacamos a un gobernador. Lo hicimos renunciar y eso es solo el principio. Ahora vamos a ir a la Cámara de Representantes y al Senado y vamos a limpiar la casa. Ahí quedan muchos corruptos trabajando”.

Por otro lado, desde el centro de la montaña llegaron dos amigas con una pancarta creada en un paño negro que leía: “Llegaste como el mesías y te vas como el anticristo”.

Gabriela López, de 26 años y de Barranquitas, explicó que esta fue su manera de celebrar la renuncia de Rosselló Nevares, la cual será efectiva el próximo 2 de agosto.

“Desde que empecé en la primera marcha que asistí, he sentido mucha euforia, mucha emoción de ver al pueblo de Puerto Rico todo unido, sin partidismo, sin divisiones y bien contenta de ser parte de todo esto, de la historia que estamos viviendo”, manifestó.

Su amiga Graciela Sandoval, de 23 años y residente de Naranjito, también destacó la emoción de todo lo que la juventud logró en 12 días de multitudinarias manifestaciones.

“Somos parte de la historia, para nosotros es algo súper grande”, sentenció.

De izquierda a derecha, Graciela Sandoval y Gabriela López llegan con su pancarta a La Fortaleza. (Frances Rosario)
De izquierda a derecha, Graciela Sandoval y Gabriela López llegan con su pancarta a La Fortaleza. (Frances Rosario)

A diferencia de los pasados días, eran menos los manifestantes que se congregaron esta tarde en la intersección de las calles Del Cristo y Fortaleza.

Hasta allí llegaron jóvenes, ancianos, niños y hasta una pareja con su perro vestido con una bandera de Puerto Rico. Entre el grupo se destacó la excandidata a la gobernación Alexandra Lúgaro.

“Esto no es ni siquiera una celebración. Es que la manifestación continúa. Se logró la salida de Ricardo Rosselló, de otros principales oficiales de agencia, de agencias que tenían mayores contratos de publicidad. Pero la gente tiene el entendimiento que aquí la lucha no ha cesado. Aquí hay que exigir la auditoría de la deuda (y) quien está próxima en línea en sucesión es Wanda Vázquez, quien también se alega ha participado en estos esquemas de corrupción y los ha encubierto. Por lo tanto, el pueblo exige que quien sea nombrado, quien ocupe la silla de la gobernación de Puerto Rico, sea una persona competente y una persona honesta, y el pueblo no va a dejar las calles hasta tanto eso sea logrado”, puntualizó Lúgaro.

A las 4:30 p.m. ya era más nutrido el grupo que se había congregado frente a La Fortaleza. Eran alrededor de 500 los manifestantes que estaban en son de fiesta, en su mayoría familias.

“Que llueva, que llueva, que Wanda va pa’ fuera”, era de una las consignas que entonaban.