Cientos de jóvenes acudieron a la feria de empleos que tuvo lugar hoy el Coliseo Mario “Quijote” Morales de Guaynabo y cuyo enfoque principal era precisamente la población entre los 16 a 21 años, y muchos de ellos salieron de allí con un contrato laboral.

Al evento impulsado por el Departamento Trabajo y Recursos Humanos (DTRH), se unieron una docena de empresas, así como otras agencias de gobierno y el municipio de Guaynabo, de manera que el proceso de contratación, o acuerdo para eventual contratación, pudiera realizarse de la manera más ágil posible.

“Es nuestra primera feria de empleo para jóvenes de 16 a 21 años. La hemos denominado De la Escuela a tu Primera Trabajo”, comentó Alexandra Salgado Colón, subsecretaria del DTRH. “A la hora que estamos hablando (pasada la 1:00 p.m.) hemos atendido a sobre 500 jóvenes que han llegado hasta aquí con sus padres o encargados. Tenemos sobre 25 patronos ofreciendo sobre 1,000 plazas de empleo en el área de servicios, administración, farmacia, alimentos, servicios a las aerolíneas”.

La subsecretaria agregó que lo que han notado entre los jóvenes es que están “superentusiasmados, ávidos de tener su primera experiencia de empleo”.

“Y para el Departamento esto es muy importante. Queremos seguir replicando esto en otras áreas, en otros pueblos, para llevar mejores y mejores oportunidades de empleo para los jóvenes. Así que continuaremos con este esfuerzo”, afirmó Salgado.

Explicó que las ofertas de empleo hay “algunos temporeros, otros puedes evolucionar en la empresa, otros son empleos de verano. Hay diferentes ofrecimientos”.

La funcionaria sostuvo que los patronos participantes también “están bien entusiasmados. Han podido recoger muchos candidatos. Y quieren que sigamos replicando esto. Hay la necesidad de la mano de obra, y aquí hemos visto que los jóvenes están superinteresados en trabajar”.

Aunque la actividad iba dirigida a jóvenes de 16 a 21 años, también se extendió a aquellos de 14 a 16 años de edad, en cuyo caso requieren de un permiso especial del DTRH, que se estaba tramitando allí mismo, como parte de los servicios de la feria.

Según explicó Teresa Carrasquillo, del Negociado de Normas del Trabajo del DTRH, ese permiso “es una formalidad que requiere la ley, para proteger a ese menor en el lugar de trabajo, imponiendo unas restricciones en horarios y ciertas tareas que puede realizar”. Detalló que, según esas restricciones, el menor no puede trabajar entre 10:00 p.m. a 5:00 a.m. y tampoco se permite que realice trabajos peligrosos como confeccionar alimentos en una cocina, trabajar en construcción, con maquinarias pesada, o manejando vehículos de motor sin licencia.

De igual manera, estaba presente la Administración de Rehabilitación Vocacional del DTRH, con sus servicios dirigidos a las personas con diversidad funcional.

Magalis Roble Chévere, supervisora de una de las unidades de Rehabilitación Vocacional, explicó que los especialistas de la Administración evalúan la condición de cada participante, “y los ubicamos basados en esas necesidades, debilidades y fortalezas que ellos tengan”. Agregó que para lograr esa ubicación de personas con diversidad funcional en los diferentes empleos disponibles descansan en la colaboración con patronos y con el Departamento de Educación, “con las maestras de educación especial, que son quienes nos refieren a estos estudiantes de educación especial a nuestras oficinas”.

Roble comentó que en la feria habían podido atender “un sinnúmero de estudiantes con diversidad funcional y muy interesados en nuestros servicios. Muchos se han referido a nuestras oficinas, para que se evalúen, y otros ya son casos per se de nosotros y están en la continuidad”.

Aseguró que varios de los jóvenes que atendieron serán parte de “una experiencia de aprendizaje basada en trabajo, del 5 de julio al 5 de agosto”, donde “van a estar trabajando con nosotros en diferentes agencias del gobierno, que les van a dar la oportunidad, cuatro horas diarias, durante cinco días a la semana. Ya se les entregó el sobre para que ellos nos provean toda la información requerida y luego hacer el nombramiento”.

Roble recordó que cuando se habla de diversidad funcional abarca una gran cantidad de condiciones, que pueden ir desde condiciones de discapacidad física, visual, auditivo, problemas de aprendizaje, deficiencia intelectual, déficit de atención, entre muchas otras.

“Hay una gran cantidad de condiciones. Pero siempre y cuando ese estudiante tenga destrezas para ser ubicado en un empleo, es un caso para nosotros”, afirmó.

Del lado de los patronos también hubo palabras de elogio a la feria, pues a través de la misma habían conseguido reclutar decenas de jóvenes para llenar plazas vacantes.

Jorge Martínez, reclutador para la cadena de restaurantes de comida rápida Church’s Chickens, uno de los más de 20 patronos presentes en la feria, comentó que habían conseguido emplear a unos 50 jóvenes, de diversas partes de la Isla, y mostró el paquete de documentos que respaldaban su afirmación.

“Este tipo de actividad es necesario. Ayuda. En este caso es más dirigida a jóvenes y menores, que ahora en verano puedan tener esa experiencia. Les ayuda para que puedan tener esa primera experiencia en el mundo laboral”, sostuvo el reclutador.

“Hay oportunidades. En el caso de nosotros tenemos 115 restaurantes a través de toda la Isla y tenemos necesidad de empleados en todas las áreas. Y aquí hoy he tenido personas de Río Grande, de Cayey, de Humacao, San Sebastián, Carolina. O sea, no solamente área metro, no solamente de Guaynabo y San Juan”, comentó. “Ha sido una jornada bien exitosa”.

Martínez resaltó que ha visto muchos jóvenes interesados y agregó que, más allá de trabajos de verano, los menores podrían trabajar en sábado y domingo durante el semestre.

“Y ellos son empleados regulares desde que comienzan. Esto no es un contrato ahí. Es un empleado regular con todos los beneficios y todas las protecciones, acumulan vacaciones, acumulan enfermedad. O sea que lo quiero resaltar es que no es un trabajo temporero de verano. Esto es un trabajo que es regular, que ellos, en agosto, si son menores, pues trabajan sábados y domingo, pero mantienen su empleo. Tienen su empleo y son empleados regulares”, aseveró Martínez, recordando que aquellos que así lo quieran, pueden continuar creciendo con la empresa, como han hecho personas que “empezaron con nosotros como menores, y se desarrollaron, siguieron estudiando, fueron a universidad, y hoy día son gerentes, supervisores de área”.

Por su parte, el alcalde de Guaynabo, Edward O’Neill, celebró la actividad, catalogándola como “una iniciativa muy buena, excelente”, que permite sacar a los jóvenes de la calle y que se puedan desarrollar, salir adelante, seguir estudiando.

La subsecretaria exhortó al público interesado en actividades como esta a mantenerse al tanto de futuros eventos similares a través del portal del DTRH y sus páginas en las redes sociales.

“Queremos fomentar la cultura del empleo y para eso tenemos que comenzar con nuestros jóvenes desde temprana edad”, insistió Salgado. “Hay trabajo para todos. Así que lo que queremos es que las personas lleguen a esos empleos y que se inserten. Eso va a redundar en una mejoría a la economía de Puerto Rico”.