En tiempos recientes, Colombia y Puerto Rico han estrechado sus lazos comerciales y diplomáticos, pero este domingo decenas de personas reunidas en el coliseo Pedrín Zorrilla, en Hato Rey, para celebrar la independencia del país sudamericano confirmaron que los vínculos culturales y afectivos entre ambas naciones datan de hace muchos años.

La conmemoración de los 204 años de independencia de Colombia sirvió de ocasión para que ciudadanos oriundos de todos los confines de ese país y que han hecho de Puerto Rico su hogar se reencontraran, como cada año, para celebrar sus tradiciones musicales y culinarias, y para expresar de todas las maneras posibles su amor por su patria.

Bastó con que el grupo Los Caleños marcara los primeros acordes de una cumbia para que la pista demarcada para el evento se llenara. El espacio se colmó de parejas de todas las edades que con sus rítmicos pasos, su vestimenta con detalles rojos, azules y amarillos y sus sombreros de paja le hicieron honor a su tierra natal.

“Yo quiero celebrar lo que siento dentro de mí. Yo soy Colombia”, dijo sonriente cuando acabó la primera pieza musical Luz Marina Castrillón, quien es natural de Medellín y hace 10 años reside en Puerto Rico.

Castrillón es una de miles de colombianos que han echado raíces en Puerto Rico. Según Alejandro Cobo Sinisterra, cónsul general de Colombia en la Isla, los datos recogidos por la Oficina del Censo de Estados Unidos en 2010 precisan que unos 5,738 colombianos habitan en suelo boricua, pero los estimados del gobierno del país sudamericano apuntan a que la cifra podría alcanzar las 11,000 personas.

“Los colombianos aquí siempre han encontrado muchas posibilidades en el ámbito del trabajo. El 70% de la gente económicamente activa son profesionales. Además, tenemos muchos estudiantes en las diferentes universidades, principalmente en el Recinto (Universitario) de Mayagüez, estudiantes de maestría y doctorado en ingeniería y ciencias. Ha sido una emigración muy paulatina y que se mantiene desde hace muchos años”, dijo a este medio Cobo Sinisterra.

El cónsul general de Colombia en Puerto Rico resaltó que el regreso de la aerolínea Avianca al mercado local ha fortalecido los lazos entre ambos países desde el año pasado, y le ha abierto una vía adicional a la comunidad colombiana en la Isla para acercarse a su tierra.

Celia Cortés, quien llegó a Puerto Rico con su madre hace 45 años desde la ciudad de Barranquilla, es una de las que celebra los vínculos fortalecidos entre ambos países, y está confiada en que la relación entre ambas partes seguirá creciendo y solidificándose.

“Me siento bien contenta porque eso nos da a Colombia una esperanza de ver cómo la gente tiene una nueva visión acerca de Colombia. Quince años atrás, la gente tenía terror de ir a Colombia, hoy la gente dice que no, y cuando van, quedan encantados. Eso nos dolía porque la gente pensaba que todo era droga, y ahora cambia su modo de pensar”, manifestó la mujer de 62 años.

A la fiesta colombiana se sumaron numerosos puertorriqueños como Miguel Ángel Torres Hernández, quien sin haber visitado el país ni tener ninguna conexión directa, llegó hasta el coliseo capitalino con su esposa, Luz Teresa Luzunaris, para celebrar su aniversario de casados.

“El interés de compartir con otras personas se está acabando, por eso estamos como estamos... Si no compartimos con la otra gente, estamos muertos. Hay que compartir y dividir lo que uno tiene”, dijo el hombre de 67 años natural de Bayamón.

Torres Hernández se disfrutó cada instante y cada detalle que le revelara algún aspecto de la cultura colombiana, que hasta este domingo le resultaba completamente ajena. Al poco rato de estar en la celebración, ni las costumbres ni la gente le resultaban extraños.

“Aquí conseguí un montón (de amigos). Toda esta gente que está aquí, me han abierto los brazos como si fuera colombiano”, manifestó Torres Hernández entusiasmado.

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