No son solo las risas que provoca lo que celebra el comediante cidreño Melvin Vázquez cada vez que interpreta uno de sus personajes; a esto le suma la satisfacción de ayudar a otros a despejar su mente y de haber logrado el sueño de escuchar los aplausos de su gente.

Melvin, canta, baila y muestra sus dotes y experiencia en la comedia musical cada vez que personifica a El Borrachito Mao, El Bravo del Swing y a Doña Esperanza.

“En la comedia me inicio en el 2002, a través de un reality show llamado Objetivo Club Sunshine (2002). Eso despertó en mí la pasión por las artes escénicas y seguí entusiasmado y comencé a desarrollar las primeras Noches de Carcajadas aquí en mi pueblo de Cidra, teniendo una gran aceptación. Comenzamos de poquito en poquito y el público fue viendo el desarrollo en mí. Comencé a desarrollar personajes”, contó el artista.

Dijo que, primero, se lanzó a la aventura del ‘stand up comedy’, pero en el transcurso descubrió algo que lo llenaba, crear personajes que, más tarde, dieron versatilidad a sus presentaciones artísticas y sus “sketches” de comedia, incluyendo la música.

“El fuerte mío es interpretar personajes. En mis comedias siempre canto, es como tipo musical y las personas escuchan mis versiones musicales tal vez de canciones que son originales de otros artistas, y pues yo le hago parodia. Con mis personajes también saco a pasear el bailarín frustrado que hay en mí. Bailo, canto, de todo un poquito, lo que el talento me permita”, destacó.

Melvin Vazquez  como Doña Esperanza.
Melvin Vazquez como Doña Esperanza. (XAVIER GARCIA)

Aunque, cuando se transforma en alguno de sus personajes, luce como pez en el agua y se desenvuelve con gran naturalidad en la improvisación, Melvin se considera una persona tímida.

“Siento que la comedia vive en mí. Me considero, como dicen por ahí, una persona un poquito pachosa, en algunas ocasiones, tímido, pero los personajes sacan más de lo que tal vez yo en persona puedo sacar. Pero me considero una persona alegre, yo comencé haciendo ‘stand up comedy’ y cuando uno hace ‘stand up comedy’, pues tienes que transmitir esa alegría y, entiendo que los personajes lo exageran un poco”, confesó el artista.

“Mi primer personaje fue El Borracho Mao. Para este personaje fue de inspiración un amigo mío, el cual quise muchísimo, que sí tenía problemas de alcoholismo, pero era tan alegre que hasta opacaba la personalidad de los demás con sus ocurrencias. Era una persona súper alegre y eso me motivó a hacer un personaje de él”, dijo Melvin, quien añadió que este personaje “está ganando mucho cariño del público, pues canta y hace sus propias versiones de las canciones más populares de los artistas urbanos”.

Otra de las figuras que personifica es El Bravo del Swing, inspirado en los exponentes del merengue que se destacaron en la década de los 80 y 90.

“Me crie en esa época del merengue… de Jossie Esteban, Bonny Cepeda, Grupo Manía. El Bravo del Swing viene porque él tiene ‘swing’ bailando. Esos movimientos y el personaje que cada merenguero traía en esa época, yo lo quise desarrollar en ese personaje. Es más bien ‘el bravo’ porque él se hace llamar el mejor bailando”, indicó “Melvin Comedia”, como se hace llamar en sus redes sociales, donde comparte –mayormente- su contenido.

Para su tercer personaje, Doña Esperanza, el artista confiesa haberse inspirado en las personalidades de sus dos abuelas, y afirma que ha tenido una hermosa acogida, sobre todo de los adultos mayores.

“Una era media cascarrabia y la otra bien dulce y picoreta. Uní esas dos personalidades y esa es Doña Esperanza. Con ese personaje también viajo la isla completa, dando servicios de entretenimiento a los envejecientes. Es un personaje que mucha gente le ha cogido cariño”, afirmó el comediante, quien realiza presentaciones a través de toda la Isla y en los Estados Unidos.

Aunque dicen que “nadie es profeta en su tierra”, este talentoso cidreño goza del reconocimiento de su gente, quienes lo ven en la plaza vestido de sus personajes y no dudan en saludarlo, tocarle bocina, echar un chiste con él, alabar sus dotes como comediante, y hasta detenerse para tomarse una foto. Por eso, para Melvin, lo más especial de su faceta artística es lograr un efecto positivo en el público que decide ver su contenido.

“Lo más especial para mí es que en ese ratito la gente olvide los problemas. Me dicen: ‘Gracias por hacerme reír un ratito, me hacía falta’. En las redes me escriben: ‘Gracias por quitarme la depresión’. Esa es la mejor recompensa…Yo sigo haciéndolo para tener esos ratitos especiales para mi público”, comentó el comediante, quien sueña con “representar Puerto Rico a nivel internacional y compartir mi talento en otros lugares”.

Quienes deseen seguir a este talentoso cidreño y conocer más de sus ocurrencias, puedes hacerlo a través de sus redes sociales, en Facebook como Melvin Comedia Fans y en Instagram y Youtube como Melvin Comedia.